El Espanyol está gozando de tres días de descanso y no volverá a los entrenamientos hasta el lunes, pero el club ha aprovechado para compartir las declaraciones de Clemens Riedel, uno de los nombres propios de este inicio de curso. El central alemán llegó cuando se cayó la opción de Marash Kumbulla, generó dudas por su juventud y falta de experiencia, pero en los últimos partidos ha empezado a ganarse a la afición y a la confianza de Manolo González.
La adaptación al fútbol español
El propio Riedel reconoce que el aterrizaje en Barcelona está siendo positivo: “Las primeras semanas han ido muy bien para mí, creo que la adaptación está siendo muy buena. No siempre es fácil, porque hablan en castellano, pero he de aprenderlo y sí, me siento muy bien”. Se le nota cómodo, aunque admite que el idioma todavía es un reto.
Diferencias entre España y Alemania
El central también comparó lo que se ha encontrado en LaLiga con lo que conocía en su país: “Para mí es un placer haber jugado los últimos tres partidos, y creo que la diferencia es un poco entre los jugadores, a nivel técnico. Aquí en España son más buenos técnicamente pero en Alemania es más de fuerza e intensidad, y tienes jugadores más corpulentos, delanteros de casi dos metros. Aquí en España es un poco más de pase y técnica”. Un análisis que explica por qué se le ve disfrutando del estilo más asociativo del fútbol español.
Confianza en el equipo
Riedel no solo habla de sí mismo, también valora al grupo: “Creo que jugamos muy buen fútbol, esta temporada y en todos los partidos. Los partidos en casa han sido muy buenos, jugamos un muy buen fútbol, creamos muchas ocasiones y creo que hemos de seguir así. Creo que hemos de mejorar en esto, y no encajar tantos goles. Como defensa, quiero defender cada acción, cada oportunidad, y sí, hemos de hacer los goles. Creamos muchas ocasiones en el último tercio y hemos de mejorar en eso. Hacer goles y ganar los partidos así”.
Mirando al futuro
El central alemán termina con un mensaje de ambición y optimismo: “Creo que trabajaremos. El equipo está en un muy buen camino y tenemos muchas ganas de jugar aquí en casa los partidos, y todos para ganar”. Unas palabras que resumen bien lo que transmite: ganas de crecer, seguridad en el grupo y la ilusión de consolidarse como uno de los hombres importantes en la defensa del Espanyol.