El Espanyol B arranca el próximo fin de semana la segunda vuelta con un encuentro de máxima dificultad. Los blanquiazules visitan al ‘coco’ de la categoría, el Numancia, en Los Pajaritos. Y lo hacen sumidos en una de las mejores rachas de las últimas campañas, puesto que suman tres victorias consecutivas. Lograr una cuarta sería entrar en el libro de los mejores filiales de la historia del Espanyol.
No es algo habitual que el Espanyol B consiga ganar tres partidos consecutivos en una categoría gestionada por la RFEF. Es más, la pasada campaña no lo consiguió. La igualdad de la ya desaparecida Segunda división B y la del actual grupo III de la Segunda RFEF hace que no sea sencillo y, a pesar de que en las dos primeras temporadas tras el último ascenso se logró al menos una vez por curso, en las dos anteriores a la 2017-18 no se consiguió encadenar tres triunfos seguidos.
Pero si ya es difícil ganar tres jornadas consecutivas, imagínense más. Por norma general, a lo largo de la historia del Espanyol B la buena racha de victorias se ha quedado en tres: hasta en 20 ocasiones le ha sucedido al filial blanquiazul en sus 21 campañas en el fútbol estatal. Solo seis veces se ha superado, con lo que el reto es mayúsculo. Y más por la plaza en la que se debe lograr.
En la campaña 1997-98 se ganó de la jornada 29 a la 32, ambas incluidas –y con un espectacular balance de 14 goles a favor y ninguno en contra a las órdenes de Alfonso Salinas (qepd)–; en la 2001-02 se enlazaron cinco duelos ganando hasta en dos ocasiones, de la jornada 16 a la 21 y de la 33 a la 37; en la 2003-04 se volvieron a sumar cinco triunfos seguidos, de la jornada 27 a la 31; el curso 2013-14 la racha fue a más y fueron seis triunfos consecutivos, de la jornada 27 a la 32; y la última vez que se superaron las tres victorias seguidas fue en la 2019-20, con José Aurelio Gay al mando. En aquella ocasión se hizo a lo grande: siete triunfos consecutivos, de la jornada 12 a la 18. El filial de Luis Blanco tratará de emular a los mejores.
A por el más difícil todavía como visitante
Pero es que además el Espanyol B puede rizar el rizo, logrando el que sería su tercer triunfo consecutivo a domicilio tras vencer al Ejea (1-4) y al Brea (1-2). La última vez que se logró fue en la racha comentada de siete triunfos seguidos en el curso 2019-20 al vencer a Prat (0-2), Atlético Levante (0-2) y Orihuela (1-3). La temporada anterior también se consiguió dicha hazaña al derrotar a Barça B (0-1 en el último derbi de filiales jugado en el Mini Estadi), Ontinyent (0-1) y Olot (0-1). Para encontrar una mejor racha de triunfos a domicilio, cinco en este caso, hay que remontarse hasta la campaña 2013-14, cuando con un Sergio González en el banquillo, que a mediados de ese curso había pasado de ayudante del técnico a preparador principal por la destitución de Manolo Márquez, se venció a Levante B (1-3), Villarreal B (0-1), Lleida Esportiu (1-2), Constància (0-1) y Sant Andreu (0-1). La dinámica ganadora como visitantes se cortó con una derrota en Son Malferit contra el Atlético Baleares (2-0).
En total, el Espanyol B ha conseguido tres victorias seguidas a domicilio en seis ocasiones en todas las temporadas que ha militado en una categoría gestionada por la RFEF y solo en una de ellas, la última comentada, ha logrado más. Además de las citadas, el filial blanquiazul lo ha conseguido en las campañas 2003-04, 2004-05 y 2007-08. Los de Luis Blanco buscarán esta próxima jornada hacerlo por séptima vez en Soria, donde solo se ha llevado los tres puntos el Europa (1-2), pero en un momento en el que el Numancia suma dos de los últimos nueve puntos como local.