El Espanyol B tiene ante sí el típico partido ‘trampa’. Este domingo al mediodía recibe a un Castellón que no conoce el triunfo, con solo dos puntos (dos empates en casa y una derrota fuera) y que es un recién ascendido. Todo ello podría hacer pensar que es uno de los equipos flojos del grupo. Pero nada más lejos de la realidad. Se trata de un histórico que quiere seguir subiendo categorías y que esta temporada no se conforma solo con la permanencia. Su director deportivo, Juan Guerrero, dejó muy claro en pretemporada que “todo lo que no sea quedar primero será un fracaso. Queremos subir lo antes posible”. Al fin y al cabo, tienen cerca de 13.000 socios. Así que de nuevo a los de David Gallego les espera un compromiso complicado.
El filial está teniendo un calendario de inicio exigente. Pero por ahora está respondiendo, a pesar de la derrota del pasado fin de semana en el campo del Hércules de Planagumà (1-0). Contra un claro candidato a subir, los de David Gallego apretaron en el segundo tiempo e hicieron méritos para haber sumado. Antes, en el único duelo en casa, el equipo dominó a otro aspirante a subir como el Lleida, especialmente en el primer tiempo, y mereció más que el empate a uno. Mientras que en la jornada inaugural, el Espanyol B pasó como una apisonadora por Badalona (1-3).
Gallego, que suele ir variando el once en función de lo que ve en los entrenos, casi ha repetido el mismo equipo en los tres partidos. Diez jugadores han sido siempre titulares y solo ha variado el acompañante de Campuzano arriba (Brugué en dos ocasiones y Alberto en una). Seguro que las rotaciones llegarán, pero por el rendimiento ofrecido apostamos por el mismo once, con la entrada de Alberto respecto el último duelo.
Estilos diferentes
Si el Espanyol B intenta ser el protagonista del juego con un fútbol combinativo, el técnico rival, Sergi Escobar, tiene claro que “este equipo se construye desde la intensidad, la solidez defensiva y minimizar al contrario”. Así que está claro lo que nos encontraremos mañana, un rival defensivo que tratará de sorprender a la contra. Los de Gallego deberán tener paciencia y tratar de no perder balones en zonas peligrosas.
El Castellón quedó eliminado el pasado miércoles de la Copa del Rey al caer en el campo del Calahorra por 2-0, con un once muy diferente al de liga. El experico Cubillas, capitán del equipo, tuvo sus minutos. Para mañana tienen sancionado al central Eneko y Máyor es duda por problemas musculares. Si no se recupera, Cubillas es la alternativa.