Tras romper el pasado fin de semana una mala racha de cinco partidos sin vencer, con su triunfo en casa contra el Manacor por 2-0, los de Luis Blanco deben tratar ahora de enlazar una buena racha de resultados que les permita luchar por la segunda plaza que da acceso a la Copa del Rey. Los dos mejores terceros de los siete grupos de División de Honor también jugarán la Copa, pero mejor no tener que estar pendiente de los demás grupos.
El Espanyol buscará así su segundo triunfo seguido en el campo del Gimnàstic Manresa este sábado por la tarde. Se trata de un recién ascendido que está luchando por lograr la permanencia. En estos momentos está en zona de descenso pero tiene la salvación a solo un punto, con lo que está muy vivo. El pasado fin de semana, por cierto, fue goleado en el campo del Girona (5-0), si bien no se trata de un rival de su ‘liga’. El Espanyol lógicamente tampoco, pero jugando en casa los manresanos tratarán de sumar como sea.
El Juvenil A, más allá de romper su mala racha de cinco partidos seguidos sin vencer, ante el Manacor jugó a gran nivel el pasado fin de semana, creando muchas ocasiones. El extremo Pau Salvans decidió el encuentro con dos goles (2-0). El técnico estaba satisfecho más que por la victoria en sí por el juego mostrado por el equipo. “Salimos muy contentos del partido y con sensaciones muy positivas. Está claro que los buenos resultados ayudan y la victoria nos viene muy bien para la confianza. Veníamos de hacer buenos partidos sin tener el premio que merecíamos y en ese sentido la victoria aún confirma más las buenas sensaciones”, declaró el míster.
En la primera vuelta el Espanyol se impuso con comodidad por 3-0. Javi Gutiérrez abrió bien pronto el marcador, lo que desbarató el planteamiento del partido del Gimnàstic Manresa. Y en la segunda parte Brugué marcó dos goles. “El Gimnàstic Manresa es un rival muy fuerte en casa, domina las segundas jugadas y apuesta por un fútbol muy vertical. Tendremos que contrarrestar todos estos factores con nuestro juego”, analizó Blanco.
Grave lesión
Manrique estará entre seis y ocho meses fuera de los terrenos de juego al sufrir la temida triada en la rodilla (cruzado anterior, menisco interno y ligamento lateral interno). “Es una pena, pero hay que sobreponerse y desearle que se recupere bien”, apuntó Blanco sobre el jugador incorporado este verano del Cornellà.
