El duelo entre la UD Las Palmas y el Espanyol, que pondrá fin a 2024 para ambos equipos, trae consigo un reencuentro cargado de morbo. Diego Martínez, actual entrenador del conjunto canario, vivirá un partido especial frente a su antiguo equipo, el Espanyol, donde su etapa dejó más sombras que luces. El técnico gallego, llamado a liderar un proyecto ambicioso en el club perico, tuvo que marcharse por la puerta de atrás tras un curso plagado de desaciertos que terminó en el fatídico descenso a Segunda división. Ahora, en un contexto muy distinto, Diego Martínez ha encontrado estabilidad en Las Palmas. Desde su llegada, ha logrado revertir una situación crítica, sacando al equipo de la zona de descenso y llevándolo a una posición de relativa tranquilidad en la tabla. Su filosofía de trabajo parece haber calado en la plantilla amarilla, y este cierre de año representa una oportunidad inmejorable para él de reivindicarse ante su antigua afición y mostrar que los tropiezos del pasado no han definido su carrera.
“Evidentemente es un partido que entendemos que va a ser difícil, por la necesidad de sumar puntos de cara a la permanencia. El rival tiene jugadores muy rápidos con fuerte contragolpe. Un partido que va a necesitar lo mejor de nosotros”, ha explicado en la previa Diego Martínez, que ha avisado, “necesitamos que la afición esté compitiendo con el equipo, con esa pasión y convicción que nos muestra siempre”. “El Espanyol es un equipo que contraataca muy bien con gente muy rápida. Necesitamos paciencia y ritmo en la circulación. Tendremos que saber elegir el momento de profundidad y calidad del pase. Hay que tener precaución con no poder incurrir en transiciones porque en el contragolpe son peligrosos”, ha afirmado sobre el conjunto de Manolo González. “Va a ser un partido cerrado por la necesidad. Un partido muy complejo pero muy ilusionante”, explica el preparador, que explica que “nosotros queremos conseguir la máxima puntuación posible. El equipo se ha ganado el derecho por conseguir los tres puntos. El siguiente partido siempre es el más importante. Tenemos que estar centrados y luchar contra las distracciones, y es por eso que el público es tan importante y hace que empuje al equipo”.
En cuanto al estado de Alberto Moleiro, que no se autodescarta para el partido del domingo, hacía esta reflexión: “La opinión del jugador siempre la escuchamos. La valoración clínica y la opinión del jugador es muy importante. No sabemos si va a poder estar ni para cuando va a poder estar. Tendremos que valorar los riesgos”.
El gallego ha tenido palabras para el club blanquiazul, admitiendo que “todos los partidos son especiales, siempre queda en el corazón allá por donde pasas, donde has tenido el privilegio de competir. Son vivencias, aprendizajes y personas con las que tengo todavía muy buena relación, que es lo más importante en la vida, las personas”.