Sin paños calientes. Sin rodeos. Edu Expósito salió a dar la cara tras la debacle copera del Espanyol ante el Atlético Baleares, y no se escondió detrás de frases vacías. “Realmente la hemos cagado, era una eliminatoria para pasar sobre todo por la dinámica con la que veníamos”, soltó sin titubeos, consciente de que lo que se vivió ante el club de Palma fue un ridículo que va a tardar en olvidarse.
La cara del centrocampista lo decía todo. Mirada baja, tono seco y gesto de fastidio. “El vestuario está fastidiado hoy, no hemos hecho un partido correspondiente con la camiseta que llevamos”, añadió. Porque cuando no se compite, no hay excusa posible.
El gol que no te pueden hacer: “Ellos han llegado demasiado”
Preguntado por qué había fallado, Expósito fue claro: “Hemos fallado al final en muchas cosas, ellos han tenido demasiadas llegadas y ese gol no te lo pueden hacer”. Y tiene razón. El tanto de Tovar, solo en el área tras un error defensivo grave, fue un castigo justo para un equipo que nunca pareció creerse que tenía que sudar la camiseta para pasar.
Sin ritmo, sin alma, sin excusas: “Es culpa nuestra”
Ni el césped, ni el árbitro, ni la suerte. Edu fue tajante: “No estábamos con el ritmo necesario para una eliminatoria de Copa del Rey, el campo estaba bien, no podemos poner hoy la excusa de la hierba, es culpa nuestra”. No se anduvo con rodeos. Y además, lanzó un mensaje directo a la afición: “Pedir disculpas a los que han venido a animar y a los que han visto el partido desde la tele”.
El mensaje es claro: el Espanyol no compitió.
Barbastro se repite: “El partido ha sido horrible”
La herida de Barbastro sigue abierta. Y ahora hay que sumar Palma. Edu lo dijo sin rodeos: “Estamos muy fastidiados, nos duele mucho, es una derrota que no debería haber pasado”. Y fue todavía más duro con su propia actuación: “No tengo palabras porque el partido ha sido horrible, pedir disculpas porque tampoco he estado al nivel, es responsabilidad de cada uno que ha estado en el campo”.
“Cuando bajamos el ritmo somos un equipo más. Eso no puede ser”
El mensaje de Expósito no fue solo para analizar lo que pasó en el Estadio Balear. También quiso mirar más allá, a lo que viene. Y lanzó un aviso: “Cuando bajamos el ritmo somos un equipo más y eso no puede ser, hemos de ir con el cuchillo en la boca”. Porque si el Espanyol quiere seguir al mismo nivel competitivo en LaLiga, este tipo de noches no pueden volver a pasar.
Una cura de humildad que escuece: “Hoy hace daño”
Por último, Expósito reconoció que no es fácil cambiar el chip. Que tras una noche así cuesta mirar al frente. “Hoy duele mucho, cuesta mirar al domingo, hemos de digerir esto, mañana entrenaremos pero hoy hace daño”. El problema es que el calendario no espera, y el Rayo llega en apenas tres días.
El Espanyol tiene una buena oportunidad para levantar la cabeza… pero la mancha de Palma no se borra con facilidad.