Para el RCD Espanyol, la jornada 37 de LaLiga Hypermotion supuso otra vez un jarro de agua fría. Aunque se presentaba como una nueva ocasión para avanzar hacia la meta del ascenso directo, el empate contra Elche echó por tierra las ilusiones del conjunto de Manolo González: el empate del Leganés frente al Zaragoza, ocurrido justo antes de que los pericos saltaran al campo contra los ilicitanos, los había colocado momentáneamente en el segundo lugar de la tabla, a escasos dos puntos de distancia de los pepineros. No obstante, el Espanyol no logró sacar partido la situación y su duelo con Elche concluyó en un empate a dos, un marcador que no favorecía lo suficiente a los intereses de los nuestros, quedando el Espanyol con 60 puntos. El domingo, Eibar y Valladolid tenían la posibilidad de escalar posiciones significativamente: sin embargo, únicamente el Pucela lo consiguió al vencer al Huesca, igualando en puntos al líder de la clasificación, el Leganés, con 64. Por su parte, el Eibar sufrió una inesperada derrota ante el Albacete, quedándose con 61 puntos. El Espanyol, tras cosechar cuatro empates y una sola victoria en sus últimos cinco partidos, necesita en la práctica ganar casi todos los encuentros restantes y esperar pacientemente los tropiezos de sus adversarios para alcanzar una de las dos primeras posiciones y eludir el playoff, al cual parece estar abocado en la actualidad.

En ‘La Grada Ràdio’, este martes hemos seguido analizando sobre este Espanyol que ve cómo se le va esfumando la posibilidad de un ascenso directo con cada empate, enfrentándose a un playoff de resultado incierto. Como decimos, los dos conjuntos que encabezan LaLiga Hypermotion, Leganés y Valladolid, aventajan en cuatro puntos al equipo de Manolo González, que está obligado a enlazar una buena serie de victorias consecutivas para mantener viva esa posibilidad de ascender directamente: el objetivo pasa por sumar entre 12 y 13 puntos, comenzando este domingo por el Sporting de Gijón.
La curiosa comparativa Keidi Bare – Álvaro Aguado: se rompe el mito
Nuestro analista de guardia, Àlex Cobas, nos ha mostrado un gráfico confeccionado por nuestro compañero en las transmisiones de los partidos Ramon Borrós que compara las prestaciones de Álvaro Aguado y Keidi Bare, del cual se desprenden algunas conclusiones cuando menos, curiosas: en pases intentados es mejor el andaluz, pero en porcentaje de pase completado la cifra es muy similar, lo que llama la atención pensando en el perfil del primero, supuestamente mucho más técnico; igual sucede con el de pases y conducciones progresivas. A partir de aquí, en tomas exitosas -superar a rivales- gana el albanés; en toques en el área rival también, en pases de atrás recibe más Keidi, que juega más avanzado. Keidi Bare es superior en las estadísticas ofensivas en campo rival. En goles esperados está por delante Aguado, pero en disparos y asistencias gana Keidi Bare. En resumen, en los aspectos en que está por delante Aguado es por una diferencia no demasiado destacada, y en cambio en el último tercio está más presente Keidi Bare, por mucho, que este año está ejerciendo un rol diferente al que nos tenía acostumbrados.
Tiempo de tertulia: la posibilidad del ascenso directo del Espanyol, ¿ilusión o realidad?

En el tiempo de tertulia, hemos contado con Toni Bermejo, Àngel Bergadà y Ferran Granell. Bermejo, un profesional en este ámbito, destaca el estado ciclotímico en el que vive el espanyolismo este curso, a salto de caballo entre “un optimismo injustificado antes de los partidos y un pesimismo atroz después” porque se hace un análisis más por la vía del sentimiento que de la razón. Al final, “el Espanyol es otro más en un grupo de los equipos mediocres que deambulan en la parte alta de la tabla, lo más normal es acabar en playoff. Àngel Bergadà explica por su parte que “entre susto o muerte elijo susto, el menor de los males. Ya sabéis lo que pienso de la gente que dirige el Espanyol, pero no me quiero descentrar de lo primordial ahora; estamos en un partido donde nos jugamos absolutamente todo y no quiero perder el tiempo hablando de Chen Yansheng, de Mao Ye o de la venta, quiero ponerlo todo para ayudar al Espanyol. Ello no esconde que sea una mierda de temporada, un desastre absoluto, la gestión es nefasta, y cuando acabe la temporada soy partidario de ser muy duros contra la directiva y los que nos han llevado hasta aquí, pero mientras haya una opción, por difícil que sea, a por ella. El Espanyol se juega más que un ascenso”. Ferran Granell ha clamado ante la percepción de que jugar la promoción de ascenso es un hecho consumado: “No soporto este conformismo y mediocridad, parece que nos quieren hacer ver que hay que conformarse con el playoff”.
