Sigue sin ganar el Espanyol B como visitante y, con el empate de ayer en Sant Andreu (0-0), ya son cinco salidas sin lograr la victoria lejos de casa. Además, los blanquiazules únicamente han sumado dos puntos de los quince en juego en los últimos encuentros que ha actuado como visitante.
El empate en el Narcís Sala hace que el filial pierda el liderato en favor del Reus, que venció en Badalona (1-2) y suma 23 puntos, uno más que los espanyolistas.
‘Secos’ cara a puerta
El de ayer fue el segundo empate sin goles del filial blanquiazul esta campaña tras el cosechado hace cinco jornadas en Manises ante el Huracán Valencia. Los espanyolistas, pese a eso, siguen siendo el equipo más goleador de la categoría con 22 tantos. Jairo, con ocho dianas, continúa siendo el pichichi de la categoría.
Pese a quedarse sin ver puerta, el filial gozó de varias ocasiones para marcar. En los primeros minutos, el Sant Andreu estuvo más acertado que los espanyolistas, aunque la defensa visitante aguantó las acometidas de los de Piti Belmonte. Poco a poco, los blanquiazules fueron entrando en el partido y, antes del descanso, pudieron abrir el marcador. Marc Fernández fue el primero en probar suerte, pero su tiro no encontró portería. Más adelante, Pirulo estuvo a punto de inaugurar el electrónico, pero su lanzamiento de falta se marchó alto.
Tras el paso por vestuarios, el Espanyol B siguió en busca del gol. Mamadou lo probó, pero su tiro se marchó alto. La réplica local llegó por medio de Bruno, pero Koke estuvo muy acertado y abortó la acción del atacante local.
En la recta final del encuentro, Rober tuvo una de las oportunidades más claras, pero Morales estuvo acertado y evitó el tanto. Mamadou, en los últimos minutos, pudo dar el triunfo, pero tras una gran carrera no pudo definir con claridad, con lo que el marcador no se movió.
Sergio González y Diego Ribera vieron al filial en Sant Andreu
El entrenador del primer equipo, Sergio González, aprovechó el parón de la Liga BBVA debido a la jornada internacional para acudir al Narcís Sala junto a su segundo, Diego Ribera, a ver el encuentro del filial. El míster es partidario de dar oportunidades a los jóvenes -ya ha hecho debutar en Primera División a Eric, Joan Jordán y Jairo- y no es la primera vez que se le ve en la grada de algún encuentro del filial blanquiazul.
Sergio dirigió al Espanyol B durante gran parte de la pasada campaña. El de L’Hospitalet cogió al equipo en una situación complicada, pero logró la reacción del equipo y salvó al filial de manera holgada. El técnico entrenó la temporada anterior a gran parte de los futboilistas que integran la plantilla del filial blanquiazul este curso.
El preparador del primer equipo estuvo muy atento a las evoluciones de los futbolistas de Lluís Planagumà, aunque centró su atención en el que está a caballo entre los ‘mayores’ y el filial, Joan Jordán. Aún así, también tomó buena nota del resto de compañeros del mediocentro, especialmente de los que ya han tenido minutos con el primer equipo, tanto en duelos de carácter amistoso como en la final de la Copa Catalunya.