La deriva que vive el Espanyol a nivel institucional y deportivo, el pobre juego del equipo y el malestar del entorno blanquiazul con los dirigentes de la entidad han provocado que este martes durante diferentes momentos del partido ante el Burgos se hayan dejado notar desde la grada diferentes muestras de protesta. Desde la zona de animación coincidiendo con el silbido inicial ya se ha dejado sentir el cántico dirigido al palco, “Diles que se vayan, se vayan de una vez”, seguido por seguidores situados en otros sectores del estadio y que se ha repetido durante diferentes fases del encuentro. También se ha oído una sonora pitada cuando se ha decretado el final de la primera mitad, han habido gritos de “Directiva, dimisión”, e incluso han recibido los jugadores, cuando se han coreado unos irónicos “olé” cada vez que había un pase entre los jugadores de Luis Miguel Ramis. Cuando aún faltaban minutos para la finalización del partido, no han sido pocos los aficionados que hastiados por el pobre espectáculo ofrecido por los suyos han abandonado la grada del Stage Front Stadium en dirección a sus domicilios. Los pitidos se han repetido entre los espectadores que quedaban en la grada al final el encuentro.
