La Grada Online
  • Últimas noticias
  • Espanyol
  • Actualidad
  • US
La Grada Online
No hay resultados
Ver todos los resultados

Ni rastro de la ambición y estabilidad que prometía Chen Yansheng para el Espanyol

Tras ocho años de promesas vacías, Chen parece haber olvidado aquel deseo de llevar el club blanquiazul a estar entre los mejores.

por La Grada
29 de junio de 2024
en RCD Espanyol

Ferran Gómez, el capitán del Espanyol B que hizo vibrar a la Dani Jarque: “Muchos nos infravaloran, pero hemos demostrado que podemos ganar al Barça”

Carlos Bosch, presidente de la APMAE, pasa balance a la era Rastar y al reto de Alan Pace en vísperas de una semana clave para el Espanyol

Hoy en ‘La Grada Ràdio’ | Sin Liga pero con titulares: gana el Femenino y el Espanyol B tumba a un Barça con mal perder; los datos que avalan la propuesta de Manolo; ¿cuándo veremos a Koleosho romper como con Italia?

Hace apenas una semana que el Espanyol logró el ansiado ascenso a la Primera División, y la euforia de la afición perica se ha topado con la cruda realidad. La comparecencia pública del CEO Mao Ye y del director deportivo Fran Garagarza fue un jarro de agua fría: confirmaron que se avecinan tiempos difíciles y que la prioridad es optimizar al máximo los escasos recursos disponibles. El objetivo es evitar convertirse en un equipo “ascensor” y mantener una plantilla lo suficientemente competitiva para no caer nuevamente a Segunda división. Aunque no es motivo de celebración, al menos debemos reconocer que fueron sinceros al pintar este panorama, aunque no es precisamente alentador, para la afición del Espanyol.

Chen Yansheng, presidente del Espanyol durante ocho años, enfrenta ahora una situación delicada. Hay que recordar que cuando llegó a Barcelona en enero de 2016 lo hizo con la promesa de proyectar el Espanyol hacia la élite del fútbol no ya español, sino europeo. Garantizó al aficionado  no tener que vender jugadores por motivos económicos y se atrevió a pronosticar la presencia del equipo en la máxima competición europea, la Champions League, ya que veía a su último capricho capacitado para luchar para estar “al nivel de los mejores equipos del mundo”. La posibilidad de ver el Espanyol en lo más alto después de la gestión de Dani Sánchez Llibre, que estuvo a punto de abocar a la entidad al concurso de acreedores, sedujo a la masa social e incluso a los medios, pero pronto comenzaron las dudas sobre su gestión. Uno de los grandes problemas de Chen Yansheng ha sido su hermetismo acrecentado por el hecho de haber de hacer servir intermediarios para hacer llegar su mensaje; incapaz de aprender la más mínima expresión en castellano o catalán, sus palabras siempre han llegado al perico vía traductores, y las últimas veces que se ha dirigido a la masa social blanquiazul ha sido mediante una pantalla, vía telemática, dada su decisión de no viajar a Barcelona supuestamente por los impedimentos generados por la pandemia y lo apretado de su agenda profesional. El principal encargado de trasladar su mensaje ha sido el ahora CEO Mao Ye:; el alto directivo llegó al Espanyol en enero del 2016, coincidiendo con la entrada de Rastar; anteriormente ocupaba un cargo en RCD, el despacho de abogados Rousaud Costas Duran, que gestionó la operación de compraventa entre el citado Dani Sánchez Llibre y Chen Yansheng, y también realizó estudios postuniversitarios en la Universitat Abat Oliva (UAO), donde cursó un máster en gestión administrativa. Antes, también ejerció como auditor en PriceWaterhouseCoopers durante cuatro años. Sin embargo, su experiencia en entidades deportivas era nula, a diferencia de su antecesor José María Durán, que ha sido una isla durante el mandato de Chen por su buena labor al frente del club. La decisión de Chen de convertir en asesor y hombre de máxima confianza a Mao Ye se ha visto traducida en una absoluta falta de autocrítica, y su principal objetivo ha sido defender repetidamente a la propiedad y reafirmar el compromiso de Chen con el club, algo que no se corresponde con los hechos.

El desastre en que se ha convertido la gestión de Chen Yansheng queda reflejado simplemente viendo como el Espanyol se ha acabado convirtiendo en una mera trituradora de cargos: en poco más de ocho años, han pasado por la casa trece entrenadores, seis directores deportivos y se han consumado dos descensos, cuando en los restantes 80 años de vida del club se habían sumado cuatro en total. En anteriores ocasiones, cuando el club era propiedad de sus socios, las directivas pagaban con el cargo sus fracasos deportivos, pero desde la irrupción de Chen y Rastar ha habido que seguir soportando la misma propiedad. No hubiese sido problema si su apuesta hubiese seguido siendo firme, pero lo cierto es que con el paso del tiempo ha sido evidente un desgaste en Chen, que parece haberse cansado del Espanyol, en especial en los momentos en que no era tan aprovechable económicamente. Pese a salvarse del desastre que hubiese sido seguir en Segunda para la economía, la plantilla y también la autoestima del Espanyol, Chen parece haber olvidado aquel deseo de llevar el club a estar entre los mejores del continente, y lo peor es que ha saboteado los intentos de compra que se han repetido en los últimos tiempos y que tanto habían ilusionado al espanyolismo. Muchos creen que hasta que extraiga la última gota de sangre, léase de beneficios económicos, no dejará soltar su presa, para desesperación de los que ansían ver un Espanyol capaz de luchar de una vez por objetivos ambiciosos.

  • Aviso Legal
  • Politíca de Cookies

© 2025 La Grada

No hay resultados
Ver todos los resultados
  • Últimas noticias
  • Espanyol
  • Actualidad
  • US

© 2025 La Grada