Mientras el entorno del Espanyol sigue marcado por la polémica salida de Joan García y la inquietud generada en buena parte de la afición, el club ha comenzado a mover ficha de cara al futuro. Este domingo, durante su intervención en el 33è Aplec de Penyes celebrado en La Roca del Vallès, el CEO blanquiazul, Mao Ye, lanzó un mensaje claro: el Espanyol no ha detenido su planificación. “Nosotros estamos trabajando; ha habido mucho ruido con Joan García, pero estamos focalizados en otras tareas de renovación y fichajes”, afirmó ante un espanyolismo que pedía explicaciones y señales de gestión. Ese trabajo comienza a materializarse. El club tiene ya varios refuerzos cerrados y las primeras oficializaciones podrían llegar esta misma semana.

Recordemos que son varios los refuerzos que a falta de esa oficialidad el club tiene cerrados: el hasta ahora delantero del Alavés Kike García, que a sus 35 años viene acaba de firmar su mejor temporada en Primera división con 13 goles, Miguel Rubio (Granada), José Salinas (Elche) y Marcos Fernández (Betis Deportivo).

El primero, salvo contratiempo de última hora, será precisamente Marcos Fernández. La operación con el delantero bético lleva semanas perfilada. Fernández, que termina contrato con la entidad verdiblanca, llegará libre altras una temporada destacada en Primera Federación. Ha sido el segundo máximo goleador del Betis Deportivo con diez tantos en 34 partidos, y su rendimiento no ha pasado desapercibido para el área deportiva perica. Ni el intento del Betis por renovarlo le ha convencido para quedarse. El delantero buscaba un salto al fútbol profesional, y el Espanyol ha aprovechado la oportunidad.

Con esta incorporación, el club mantiene su línea de austeridad en el mercado: será el enésimo fichaje a coste cero, en consonancia con los últimos tres periodos de traspasos en los que no se ha invertido un solo euro. A falta de conocer los detalles del plan de refuerzos completo, la llegada de Marcos encaja en el perfil de apuestas jóvenes, con proyección, y potencial para asentarse en el primer equipo.
Más allá del nombre propio, lo relevante del mensaje lanzado por Mao Ye es que el club no ha quedado paralizado por la situación de Joan García. Mientras la afición sigue esperando una despedida del portero y claridad en otros frentes como el de Javi Puado, la dirección deportiva ha seguido adelante, sin escapar del ruido pero sin dejarse arrastrar por él. “Estamos focalizados en otras tareas”, insistió el CEO.
El Espanyol empieza a dar pasos concretos hacia la próxima temporada. Quedan aún muchos interrogantes por resolver, pero las primeras respuestas están al caer. Y esta vez, serán oficiales.
