El pasado 5 de noviembre, aún no hace dos meses, el Espanyol decidía destituir a Luis García como entrenador del primer equipo y situaba en el banquillo a Luis Miguel Ramis. Los últimos resultados del equipo, cuatro puntos de los últimos quince posibles que estaba entonces en disputa, hicieron optar a los dirigentes de la entidad a cesar al técnico. Teóricamente, la intención con la marcha de Luis García era buscar “un punto de inflexión” e implementar un estilo de juego que permitiese lograr el ascenso a Primera división “con mayor seguridad”, algo que se pensaba era incompatible con la continuidad del ovetense. Cuando Luis García se vio forzado a dejar el Espanyol, el equipo era quinto clasificado de la categoría con 24 puntos, a cuatro del entonces líder, el Leganés. Los blanquiazules atravesaban la que era su peor racha de resultados hasta el momento al perder contra precisamente Leganés (0-1) y Sporting (2-0) y empatar ante el Eibar (2-2). En el anuncio oficial del cese el Espanyol defendía que la decisión venía motivada por el “único y claro objetivo de lograr el ascenso a la máxima categoría”, y Fran Garagarza comentó el día de la presentación de Ramis que la destitución de Luis García “era lo mejor para llegar al objetivo, se necesitaba un cambio”. El balance del Espanyol de Luis García en 14 jornadas de LaLiga Hypermotion fue de siete victorias -un 50% del total-, tres empates (21%) y cuatro derrotas (28%).
Con Luis Miguel Ramis, el sucesor de Luis García en el banquillo del Espanyol, no ha llegado aún la esperada reacción
Pocas horas más tarde, el Espanyol confirmaba que el relevo de Luis García era como decíamos Luis Miguel Ramis, un preparador al que la dirección deportiva consideraba mejor preparado para redirigir la trayectoria del equipo con una propuesta futbolística más pragmática que no la del asturiano, que aparentemente no era bien asimilada por la plantilla. Ahora, con el margen que da el tiempo que Ramis lleva ya en el banquillo, se puede afirmar que de momento el relevo no está dando los frutos que todo el mundo esperaba. Sabiendo que la apuesta por el del Morell era resultadista, son precisamente los resultados los que no están acompañando su propuesta: de los siete partidos que lleva dirigidos en LaLiga Hypermotion, solo ha conseguido dos victorias, un 28% de victorias -poco más de la mitad de triunfos que con Luis García-, ha empatado cuatro partidos, un 57%, y ha perdido uno, un 14% El equipo está provisionalmente cuarto, a la espera de lo que suceda esta noche en el Valladolid-Racing de Ferrol, a 5 puntos de la cabeza de la tabla, uno más que cuando se cesó a Luis.

El estilo de juego de Ramis en el Espanyol tampoco acaba con los errores del pasado
Si los resultados no avalan de momento la apuesta por Ramis, tampoco se está cumpliendo con esa voluntad de conseguir poner en marcha un estilo de juego que facilitase el objetivo del ascenso. No aparece por ningún lado la solidez y la consistencia que quería implementar en sus hombres, y no hay rastro de ese equilibrio entre el ataque y la defensa que reivindicaba a su llegada. Los errores defensivos siguen siendo recurrentes, y en cambio en ataque se ha perdido parte de la contundencia ofensiva que caracterizaba al Espanyol de Luis García.
