La afición del Espanyol ha tenido que atravesar demasiados desiertos en los últimos años, pero parece que, por fin, este equipo empieza a ofrecer un rumbo claro. Al menos, eso es lo que transmitió Àngel Bergadà en su intervención en La Opinión del Día de La Grada Ràdio, donde dejó reflexiones interesantes sobre el momento del conjunto blanquiazul. Su análisis fue directo:
“Hago esta opinión aún con el recuerdo reciente del partido ante el Girona, pero no vengo a hablar de eso”, Las sensaciones que me está transmitiendo este Espanyol 2025 son las de un equipo que, por fin, podemos decir que sabe a qué juega. Tiene un sistema de juego definido, tiene un once muy claro y que todos podemos decir de memoria. Incluso los cambios parecen estar previstos ya desde el principio, sería eso de que ‘no hay más cera que la que arde’”
Una declaración que, en clave perica, suena casi a revolución. Después de demasiados bandazos, un Espanyol con identidad es casi un acontecimiento. Pero Bergadà no se quedó ahí, sino que matizó algo que también es evidente: este equipo vive con una exigencia máxima, donde cada detalle cuenta:
“El plan A del Espanyol, porque no hay un plan B, pasa por unos jugadores absolutamente tensionados, concentrados, con una afición que les está encima y no les deja relajarse en ningún momento”
Y la gran pregunta:
“¿Será esto suficiente para salir fuera de casa y ganar como hicimos en Vitoria? Ya se verá, es una incógnita que ni la inteligencia artificial sabe desvelar de momento”
Aquí hay un punto clave. En casa, el equipo es reconocible, sólido, con una idea de juego clara y eficaz. Pero lejos del fortín perico, la historia ha sido otra… hasta ese triunfo en Mendizorroza que dejó la duda de si era un punto de inflexión o un espejismo.
Bergadà, eso sí, quiso lanzar un mensaje de optimismo dentro de la prudencia.
“Lo que estamos viendo es que el Espanyol ahora juega a algo, hace algo que sabe hacer muy bien. Manolo González no dispone de muy buenas cartas, pero las está usando con inteligencia y muy bien. El Espanyol es un equipo muy reconocible, sabemos lo que hará al menos cuando está en casa. Fuera está por confirmar lo que vimos en Mendizorroza”
Y lo más importante.
“Hay motivos para ser optimistas, el equipo compite y la afición padece, pero la suma de ambas cosas ha de hacer que al final consigamos el objetivo, que no es otro que la permanencia. Creo que lo conseguiremos y que por fin estamos en el buen camino”.