La tensión entre el Espanyol y el estamento arbitral sigue en su punto álgido. Desde aquel fatídico descenso en 2023, donde decisiones clave en partidos ante el Atlético de Madrid y el Valencia marcaron el destino del equipo, la afición perica siente que los errores arbitrales se han convertido en una constante en su contra. La polémica del Mallorca – Espanyol de hace dos semanas solo ha reavivado la llama, y ahora, la situación ha explotado con la aparición de una pancarta contra Carlos del Cerro Grande en los aledaños del RCDE Stadium antes del partido contra el Atlético de Madrid.
La pancarta contra Del Cerro Grande que desata la ira del estamento arbitral
En ella, el colegiado aparecía con una diana en la cabeza junto al mensaje: “Se busca Carlos del Cerdo Grande. LaLiga Mafia”. Las reacciones no tardaron en llegar. El Comité Técnico de Árbitros (CTA) calificó los hechos como “inadmisibles”, denunció la “escalada de violencia verbal” contra su colectivo y pidió la implicación del Consejo Superior de Deportes (CSD) para frenar lo que consideran una amenaza creciente contra su integridad. “Hoy ha sido una pancarta. ¿Y mañana, qué?”, sentenciaron en un comunicado.
El Espanyol condena la pancarta contra Del Cerro Grande y colabora con los Mossos
El Espanyol, por su parte, también emitió un mensaje oficial en el que condenó la acción, asegurando que el club “lamenta profundamente la aparición de una pancarta que cruza los límites deportivos y personales en contra de uno de los integrantes del colectivo arbitral”. Asimismo, afirmó estar colaborando con los Mossos d’Esquadra para esclarecer los hechos y reiteró su rechazo a cualquier tipo de violencia en el fútbol.
Temor en el entorno del Espanyol: ¿habrá represalias arbitrales tras la polémica pancarta?
Sin embargo, el miedo en el espanyolismo es otro. Porque si bien la entidad no tiene ninguna responsabilidad en la creación de la pancarta e incluso atendiendo a las manifestaciones tras el último encuentro de Manolo González y Edu Expósito desde el vestuario parecía seguirse la consigna de no hablar más en tono crítico de este tema arbitral, el riesgo de represalias arbitrales es evidente. El CTA es un organismo extremadamente corporativista cuando se siente atacado y lo que preocupa en el entorno perico es que esta situación sirva como excusa para que el equipo vuelva a verse perjudicado en las decisiones clave de los partidos, justo en un momento en que lucha por la permanencia. La mala actuación de Alberola Rojas en el último encuentro ante el Atlético, con errores que perjudicaron al Espanyol, no ha hecho sino alimentar estas sospechas.
Errores arbitrales y sensación de agravio: el trasfondo del malestar blanquiazul
Más allá de la polémica pancarta, lo que no se está poniendo en contexto en la opinión pública es el porqué de este descontento. Se ha generado un enorme revuelo mediático en torno a este incidente sin que se analicen las causas del malestar de la afición blanquiazul, que lleva años sintiéndose agraviada por decisiones arbitrales que han comprometido el futuro deportivo y económico del club. Evidentemente, la pancarta es totalmente reprobable, pero también lo es el hecho de que errores arbitrales reiterados puedan afectar la viabilidad de una entidad que en 2025 celebra su 125 aniversario. La pregunta que muchos pericos se hacen es clara: ¿qué hace más daño al fútbol, una pancarta desafortunada o decisiones arbitrales que pueden condenar a un club histórico?
