La jornada de hoy en La Grada Ràdio ha estado cargadita de temas, porque la actualidad del Espanyol no da respiro y hay frentes abiertos en todos lados: el deportivo, el institucional y, cómo no, el del mercado.
Anoeta en el horizonte
Tras la remontada de infarto contra el Atlético, el equipo ya trabaja pensando en la visita a Anoeta. Partido duro, contra una Real Sociedad que no perdona en casa, y que servirá para medir de verdad cómo de alto está el nivel competitivo de los de Manolo González. La ilusión está ahí, pero también la prudencia: toca seguir sumando.
El OK del CSD
En lo institucional, seguimos pendientes de la compra de Velocity, el grupo de Alan Pace. Javier de Haro ha apuntado que el “OK” del CSD ya está dado y que LaLiga lo validará en breve. Nosotros no hemos podido obtener confirmación, con el matiz de que en principio LaLiga ni siquiera debería dar ese visto bueno. Sea como sea, si no está ya hecho parece cosa de días que el cambio de manos quede totalmente oficializado.
Garagarza contra el reloj: Guido Rodríguez, Luca Koleosho, y el futuro de Antoniu Roca
Mientras tanto, el mercado se cierra el 1 de septiembre y Fran Garagarza tiene trabajo. La prioridad de Manolo está clara: tres fichajes como mínimo. Ayer contamos que el Espanyol preguntó por Guido Rodríguez. Interés real, sí, pero lejísimos de ser un fichaje cerrado como se ha dicho en otros sitios. La ficha del jugador es altísima y la única vía realista sería una cesión pura del West Ham, compartiendo salario. Nada fácil.
La renovación hasta 2028 de Antoniu Roca, anunciada ayer, tiene importancia estratégica para ligar talento emergente, aunque no se puede obviar que si finalmente llega otro extremo, podría marchar este verano vía cesión. Ahí sobrevuela el nombre de Luca Koleosho. En su momento dimos por descartado el interés, pero ahora son varios medios solventes los que apuntan a una reactivación. Francesc Via, que lo vio en acción contra la Lazio, se mostró escéptico: “lo vi fuera de forma”, dijo en antena. Lo que sí se baraja es que la operación pueda ser beneficiosa para el Espanyol por la sinergia con el Burnley y que no afecte demasiado al presupuesto que debe cubrir las piezas prioritarias.
Cantera en movimiento
En clave de salidas, Rafa Bauza jugará en el Mirandés. Ángel García adelantó la operación: cesión simple, sin opción de compra. Movimiento positivo para que sume minutos en LaLiga Hypermotion tras haber asomado en pretemporada con el primer equipo. Otro que se marcha es Ian Forns, que rescinde contrato y ficha por el Betis B. Dos bajas en la base que obligan a Garagarza a mover ficha en el centro del campo.
Los números del superordenador
El estreno de Liga ha servido también para que el famoso superordenador de Opta recalcule sus predicciones. Y ojo: antes del arranque nos situaba al borde del abismo, en la 16ª posición, con un 75% de opciones de salvarnos. Ahora, tras la victoria ante el Atlético, nos coloca en la 11ª plaza y con más margen respecto al descenso. El mensaje es claro: hay motivos para creer que este año no se sufrirá tanto.
Vilassar, segundo filial en Tercera
Y terminamos con fútbol catalán: la UE Vilassar, segundo filial del Espanyol, jugará finalmente en Tercera Federación. La RFEF desestimó los recursos del Som Maresme, que se queda en la Lliga Èlit. Para el Espanyol es un movimiento clave: tener un segundo filial en Tercera supone un salto en la formación de los jóvenes y refuerza la estructura de cantera.
Una jugada que, además, le ha salido muy bien a Fran Garagarza, que se estaba encontrando con dificultades para convencer a futbolistas del Juvenil a enrolarse en el conjunto del Maresme. Un ejemplo claro es Hugo Burgos, extremo que llevaba diez años en la disciplina perica y que decidió poner fin a su etapa en el club. Ahora, con el Vilassar en Tercera, el escenario cambia: el filial gana atractivo y ofrece un paso intermedio mucho más competitivo antes de llegar al Espanyol B.
Mirambell avisa: “Tenemos un equipo competitivo, pero no para toda la temporada”
El invitado de este miércoles en La opinión del día de La Grada Ràdio ha sido Ander Mirambell, que como siempre dejó reflexiones de esas que no pasan desapercibidas. El ex deportista olímpico, perico declarado, arrancó valorando el triunfo de domingo con una mezcla de entusiasmo y realismo: “Buen inicio de semana con este triunfo ante el Atlético de Madrid, una victoria que me gustaría destacar sobre todo que no implica que el Espanyol no necesite refuerzos; es muy importante traer un central y un pivote defensivo como mínimo…”.
Mirambell fue claro: disfrutar, sí, pero sin olvidar que la plantilla necesita gasolina extra para aguantar todo el curso. De hecho, insistió en que pese a la intensidad brutal de los primeros veinte minutos ante el Atleti, la realidad es que no hay fondo de armario suficiente para mantener ese nivel durante toda la temporada.
También destacó la evolución del técnico: “el Manolo de hace un año en Valladolid es muy diferente de ahora: esta evolución que ha hecho es brutal. Acertó en los cambios, dieron un plus más al Espanyol, el equipo entendió el mensaje de ir a por el partido”. Para Ander, el mérito es doble: por el entrenador, que ha crecido, y por los jugadores, que supieron responder. Y en su análisis dejó un nombre propio: Pere Milla. “Un jugador que no tuvo minutos y confianza la pasada temporada pero que ha sido capaz de sacar jugo a esta primera jornada”.
El tema de los fichajes y la venta del club tampoco quedaron fuera de su intervención. Sobre las incorporaciones fue tajante: “Fran Garagarza es quien tiene la máxima responsabilidad de sacar adelante esta situación”. Y respecto al proceso de venta al grupo de Alan Pace, Mirambell pidió paciencia: es agosto, el trámite está en el CSD, y eso ralentiza, pero no puede ser excusa para dejar pasar el mercado.
Pensando ya en lo que viene, Mirambell definió los tres puntos contra el Atlético como un “bonus extra”. Un regalo que no estaba en el guion y que puede ser clave cuando la Liga apriete en la recta final. Su receta es clara: sumar ahora que hay rivales sin ritmo, cargar la mochila y, una vez asegurada la salvación, mirar más arriba.
Y, cómo no, hubo tiempo para hablar de los nuevos propietarios: “Chapó. Han conectado con el club, entienden lo que es, el idioma no es una barrera. El tema de JJ Watt allá en la Riereta es otro ejemplo”. Mirambell ve ilusión, conexión y, sobre todo, cercanía. Algo que los pericos valoran más que mil discursos.
En definitiva, un Mirambell muy en su línea: sincero, pasional y con esa visión de aficionado que conecta con lo que muchos pericos piensan. Disfrutar, sí, pero con los pies en el suelo. Porque la temporada no ha hecho más que empezar.