El RCD Espanyol está encontrando en su estadio un refugio imprescindible para sostenerse en una temporada de máxima exigencia. Pese a que su rendimiento fuera de casa es el peor de la categoría, con apenas dos puntos sumados fruto de sus empates en el Metropolitano, su desempeño como local le está permitiendo mantenerse con opciones en la lucha por la permanencia.

En el RCDE Stadium, el equipo blanquiazul ha conseguido 21 puntos en 12 encuentros, lo que le sitúa como el sexto mejor conjunto de la categoría en casa. Su balance es de seis victorias, tres empates y solo tres derrotas, unos números que igualan los del FC Barcelona y quedan a apenas un punto de Athletic Club y Osasuna, aunque a cierta distancia de los dominadores en esta faceta: el Real Madrid (27 puntos) y el Atlético de Madrid (30 puntos).
Estas cifras destacan aún más si se sitúan en el contexto histórico reciente del club. Repasando los últimos años de competición, éste es el tercer mejor registro del Espanyol como local en las primeras 12 jornadas en su estadio. Solo lo superan los 22 puntos de la temporada 2018-19 y los 27 de la 2010-11, años en los que el equipo logró mantenerse en la zona tranquila de la clasificación.

Carlos Ferrer @LaLiga_Database
Sin embargo, el gran rendimiento en casa contrasta con su incapacidad para sumar lejos de Cornellà. Con solo 10 puntos en el global de la competición, el Espanyol es el peor equipo como visitante, quedando incluso por debajo del Valladolid (3 puntos), el Valencia (3 puntos) y el Alavés (8 puntos), los tres conjuntos que ocupan actualmente las plazas de descenso.

La ecuación es clara: si el equipo de Manolo González quiere asegurar la permanencia, necesita traducir al menos parte de su fiabilidad en casa a sus desplazamientos. Mientras tanto, el RCDE Stadium sigue erigiéndose como el bastión de resistencia de los pericos.