Este sábado, Girona y Espanyol protagonizarán en Montilivi un duelo cargado de emociones y contexto histórico. Ferran Corominas, Coro, ex jugador de ambos equipos, comparte su visión del enfrentamiento y el momento que atraviesan los dos conjuntos en una entrevista concedida a L’Esportiu. Desde las claves del partido hasta la rivalidad entre las aficiones, Coro repasa todos los aspectos de este derbi catalán.
Un Espanyol necesitado frente a un Girona enrachado
Coro analiza cómo llegan los dos equipos al choque. “El Espanyol llega en zona de descenso y muy necesitado porque arrastra una dinámica de resultados que no acompañan. Me imagino que el Girona llevará el peso del partido. Estoy convencido de que el equipo saldrá a dominar, como le gusta a Míchel, y aún más jugando en casa. Por su parte, creo que el planteamiento del Espanyol será hacerse fuerte desde la defensa e intentar hacer daño al contraataque. Este es el partido que me espero”.
Para los blanquiazules, la situación es delicada tras perder seis de sus últimos siete partidos, lo que los ha dejado en la zona roja de la tabla. “Es cierto que hasta ahora han afrontado un tramo de calendario complicado, con rivales muy exigentes contra los cuales, por instantes, no han competido del todo mal. Pero encadenaron dos triunfos en Cornellà –contra el Rayo Vallecano (2-1) y el Alavés (3-2)– en partidos muy igualados que habrían podido caer de cualquier lado. A Primera División se tienen que hacer muy bien las cosas para que lleguen los resultados y no te puedes dormir en ningún momento. ¡Espero que se pongan las pilas!”, comenta el ex delantero perico.
Rivalidad creciente entre Girona y Espanyol
Sobre el ambiente en las gradas, Coro reflexiona acerca de la relación entre las aficiones de ambos clubes. Históricamente, el Espanyol siempre ha ayudado al Girona con cesiones de jugadores, pero desde el ascenso de 2017 se ha generado una nueva rivalidad entre algunos sectores de las aficiones con algunos incidentes en la grada de Montilivi.
A pesar de esto, Coro cree que no existe una rivalidad real entre los equipos. “No creo que haya tanta rivalidad como se dice, por mucho que se pueda considerar un derbi catalán. Sí que es cierto que el debate sobre cuál de los dos es el segundo equipo de Catalunya puede hacer saltar alguna chispa. A partir de aquí, desgraciadamente, ya sabemos que en los estadios de fútbol siempre hay gente que no se sabe controlar, pero más allá de estos pequeños incidentes entre forofos, no creo que la cosa vaya a más. El respeto entre ambos clubes es mutuo”.
El trabajo de Míchel y Manolo González
Coro también valora a los entrenadores de ambos equipos, resaltando sus estilos y retos. “Todo el mundo sabe que los resultados mandan, pero lo que me gusta más del Girona es cómo dominó el curso pasado a los equipos de la parte alta de la clasificación. Me encantó y, evidentemente, Míchel es el principal culpable de este buen rendimiento. Recuerdo que, en la última media hora del partido contra el Barça, el equipo hacía lo que quería. El estilo de juego está más que definido, es reconocible y ha permitido hacer un salto cualitativo enorme. También destacaría su ambición como técnico”.
Sobre Manolo González, Coro destaca su labor al frente del Espanyol: “Manolo tiene las ideas claras y mucho carácter. Consiguió devolver al Espanyol a Primera división y está haciendo un buen trabajo, pero últimamente no está obteniendo buenos resultados. Y, como cualquier entrenador, si encadenas derrotas y no cambias la dinámica, esto te puede llegar a condenar. Espero que pueda sacar al equipo de esta situación”.
Un pronóstico realista para ambos equipos
De cara al futuro, Coro es optimista con el Girona, pero cauteloso con el Espanyol: “Soy más optimista con el Girona. Creo que sumará buenos resultados en la Champions League. No sé si accederá a la segunda fase, pero todavía tiene posibilidades y creo que puede continuar disfrutando de la competición. En LaLiga pienso que puede quedar tranquilamente entre la séptima y la décima posición. El Espanyol sufrirá más. Lo más importante es mantener la categoría. Si pudiera acabar entre el decimotercer y el decimosexto lugar, ya lo firmaría”.
