Pues ya es oficial. Lo que llevaba tiempo sonando en prensa, ahora tiene sello y comunicado: el Barça se ha llevado tres joyas de la cantera del Espanyol. Un golpe duro para la parroquia perica, que ve cómo tres chavales que se han formado en casa cruzan de acera para vestir de azulgrana.
El primero en hacerse oficial ha sido Pol Mancheño, delantero del Cadete A. “El FC Barcelona ha llegado a un acuerdo con el jugador Pol Mancheño para su incorporación en el Club en la etapa juvenil. El delantero ya entrena con el Juvenil B azulgrana. Bienvenido!”, soltaron los culés en sus redes. Y así, con una frase de bienvenida, se confirma una marcha que en Cornellà ya veían venir.
La historia se olía. Mancheño solo jugó 12 partidos la pasada temporada, y no porque le faltara gol o ganas, sino porque el club intuía que no iba a renovar. En otras palabras: ya se sabía que el tren salía rumbo a La Masia.
El chaval, que tiene 16 años, no es un cualquiera. Internacional sub-15 con España, dejó a todos boquiabiertos en el Infantil A 22-23, cuando marcó 23 goles en una temporada. Tanto llamó la atención que hasta el Real Madrid parecía tenerlo en la mano para llevárselo a La Fábrica… hasta que apareció el Barça para meter la directa y ganar la carrera.
Pero ojo, que Mancheño no llega solo. En el paquete van los hermanos Minguk y Daehan Lee, que llevaban siete años empapándose de blanquiazul. Los culés ya les habían echado el ojo antes, pero ahora han conseguido llevárselos. Minguk es un lateral derecho de esos que suben y centran con veneno, uno de esos perfiles que cuesta encontrar. Su hermano Daehan empezó como extremo, pero también ha jugado de lateral en fútbol-7, lo que le da versatilidad y más minutos para crecer.
En resumen: el Juvenil B del Barça se refuerza con tres perlas pericas mientras en el Espanyol queda la sensación de que, una vez más, el talento que se cocina en la Dani Jarque acaba alimentando a otro. Una historia ya demasiado repetida y que escuece más cuando pasa con el eterno rival.