Ya hay sentencia en uno de los casos que más ha sacudido al fútbol español en los últimos años. Hugo Mallo, según una sentencia que aún no es pública pero que ya ha sido comunicada a las partes y a la que ha tenido acceso ‘La Grada Online’, ha sido declarado culpable por parte del juzgado de lo penal nº 19 de Barcelona de los cargos por abusos a la persona que encarnaba a la mascota del RCD Espanyol durante un partido ante el Celta de Vigo disputado en el RCDE Stadium.
El futbolista y capitán del @RCCelta en el momento de los hechos (24/4/2019) Hugo Mallo, ha sido condenado por abuso sexual a la persona que vestía de mascota del @RCDEspanyol
Mas en breve en @lagradaonline #RCDE— Francesc Via (@francescviapol) September 12, 2024
La denuncia provocó un revuelo en el mundo del fútbol, ya que señalaba a un jugador reconocido por su trayectoria y con amplia experiencia. Los hechos ocurrieron durante un enfrentamiento en el estadio de Cornellà-El Prat, cuando, en los prolegómenos del encuentro, Hugo Mallo habría aprovechado su cercanía con la persona que vestía el disfraz de mascota para realizar tocamientos inapropiados. Durante el habitual saludo entre los jugadores de ambos equipos, el futbolista, al llegar a la posición de las mascotas, concretamente a la periquita al final de la fila, habría cometido el abuso, que ha sido juzgado como tal y no como agresión sexual porque se aplica el Código Penal vigente en el momento de los hechos -que los hechos se produjeran antes de la entrada en vigor de la ley “sí es sí” ha provocado que la culpabilidad se haya saldado como abuso y no delito-. “Cuando Hugo Mallo llegó a la altura de las mascotas, al periquito le dio mano como se hace habitualmente pero cuando llegó a la Sra. ——, que en ese momento estaba haciendo el papel de la periquita, éste introdujo las manos bajo el disfraz y le hizo tocamientos en los pechos”, recogía en su día la denuncia que efectuó la presunta víctima al día siguiente ante los Mossos d’Esquadra. “Según la declarante, le cogió los pechos con las manos y comenzó a hacer movimientos”.
Hugo Mallo, acusado de abuso sexual por la mascota del Espanyol.#DeportePlus pic.twitter.com/BC9FZVAUz6
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) January 30, 2024
Tras las oportunas investigaciones y declaraciones, el juez encargado del caso ha llegado a la conclusión de que existen pruebas suficientes para considerar a Mallo culpable: “Queda probado que el hoy acusado Dº Hugo Mallo Novegil (…), sobre las 20:30 horas del día 24 de abril e 2019, siendo este jugador y capitán del Real Club Celta de Vigo, con ocasión del partido entre el Real Club Deportivo Espanyol y el Real Club Celta de Vigo (…), en el momento de realizar los saludos tanto a los componentes del equipo contrario como a las dos personas que caracterizan las mascotas del Espanyol siendo estas un periquito y una periquita, al llegar a la altura de ‘Ana’ (nombre figurado), disfrazada ésta de periquita, el acusado, con la intención de satisfacer su ánimo libidinoso y de menoscabar la indemnidad sexual de la misma, le metió las manos por debajo del disfraz y le tocó los pechos, viéndose obligada ‘Ana’ a retroceder y apartar al acusado con la mano derecha”. Durante el juicio, se aportaron imágenes y testimonios tanto de la víctima como de otras personas presentes en el estadio aquel día, que contribuyeron a establecer los hechos. La sentencia considera al futbolista como responsable de un delito de abusos sexuales de acuerdo al artículo 181.1 del Código Penal, a la pena de 20 meses de multa con una cuota diaria de 10 euros, al pago de 1000 euros de indemnización y al pago de las costas procesales. Con la sentencia dictada, queda por ver cuál será el siguiente paso en este caso, ya que cabe recurso de apelación ante la Audiencia de Barcelona.
Este caso ha abierto un debate sobre los comportamientos de los futbolistas en escenarios públicos y ha puesto de relieve la importancia de promover un ambiente de respeto tanto dentro como fuera del campo. Además, ha evidenciado la dificultad de lidiar con este tipo de situaciones en el ámbito deportivo, donde la presión mediática y las pasiones de los aficionados pueden enturbiar el proceso de justicia. En cualquier caso, la resolución puede marcar un hito en la lucha por la protección de la integridad de todas las personas que participan en los espectáculos deportivos, independientemente de su papel dentro de ellos.
La reacción de Hugo Mallo a la sentencia
Una vez se ha conocido públicamente esta sentencia, Hugo Mallo ha reaccionado emitiendo esta nota en sus redes sociales:
“Después de recibir la notificación de la sentencia del Juzgado de lo Penal nº 19 de Barcelona, que me condena, me gustaría comunicar:
1.- Continúo negando rotundamente los hechos que se me atribuyen en la referida sentencia y comunico mi total desacuerdo con la argumentación de la misma.
2.- Por consiguiente, y una vez que concluya el análisis de dicha resolución, se procederá al recurso apropiado de Apelación ante la Audiencia Provincial de Barcelona.
3.- Ante las informaciones aparecidas, quiero resaltar que dicha sentencia recoge que mi tono en la declaración fue firme y ausente de toda contradicción, en la que reconocí que, al finalizar los saludos y dar la vuelta para dirigirme al centro del campo, mi mano pudo tocar la cintura de la periquita, negando absolutamente que se hubiera producido un tocamiento en los pechos de la periquita.
4.- Para finalizar comunicar que agotaré todas las instancias que sean necesarias para defender mi inocencia respecto a unos hechos sobre los que niego absolutamente cualquier autoría”.