El Rayo Vallecano de Íñigo Pérez, rival este viernes del Espanyol, llega a la recta final de la temporada con los deberes prácticamente hechos. La victoria ante el Alavés en la última jornada permitió al equipo franjirrojo alcanzar los 40 puntos, una cifra que, aunque matemáticamente no asegura la salvación, sí la deja muy encarrilada. Pero más allá de la tranquilidad que supone tener la permanencia virtual en el bolsillo, hay que destacar el impacto de Íñigo Pérez en el banquillo de Vallecas. El navarro ha sabido encontrar su propio camino sin perder la esencia de lo que hizo grande al Rayo en los últimos años, y lo ha hecho en un contexto nada sencillo. La temporada 2023-24 no ha sido precisamente un camino de rosas, con cambios en el banquillo y altibajos en lo deportivo. Sin embargo, con su carácter calmado y su apuesta por la continuidad en el estilo, ha consolidado al equipo en la zona media de la tabla. A falta de nueve jornadas para el final, el Rayo está más cerca de mirar hacia arriba que de preocuparse por lo de abajo.
Ahora, el reto es mantener el nivel y cerrar la temporada de la mejor manera posible. Con 27 puntos aún en juego, el equipo tiene margen para soñar con superar los 49 puntos que Iraola firmó en su mejor año. Si consigue encadenar buenos resultados, incluso podría acercarse a la histórica marca de 53 puntos que logró Paco Jémez en la 2012-13. Por delante quedan partidos exigentes, pero también oportunidades para seguir creciendo. Cinco de los últimos nueve encuentros serán en Vallecas, donde el Rayo se siente fuerte. Y el primero de ellos será este fin de semana ante el Espanyol, un equipo que lucha por su permanencia y que no regalará nada.
Íñigo Pérez ha comparecido en rueda de prensa antes de este duelo para analizar el estado del equipo, las claves del partido y los objetivos de aquí a final de curso. El navarro afronta la previa del partido ante el Espanyol con un mensaje de confianza y mucho respeto por el rival: “Es un partido de características similares al de la semana pasada, pero jugamos en Vallecas y estamos más arropados”, comentó, dejando claro que jugar en casa es un factor clave para su equipo. Y no es para menos: en su estadio, el Rayo se siente fuerte y la afición juega un papel fundamental. El entrenador ve un duelo intenso, con dos equipos que no han cambiado su esencia desde el inicio de temporada, al tiempo que reflexiona sobre la diferencia entre pelear por objetivos europeos y la lucha por la permanencia: “Todos sabemos que cuando estás abajo, la diferencia entre jugar para conseguir algo por arriba y subsistir en Primera división es más compleja. Somos dos equipos enérgicos y mantenemos la misma identidad de la jornada 2. Será un partido cerrado en el que nosotros tendremos que elaborar juego para hacer la diferencia”.
En cuanto a las aspiraciones europeas de los suyos, el técnico no se obsesiona, aunque tampoco descarta nada: “Yo es que no haya pensado en Europa nunca. Yo sueño en junio”. De cara a esta recta final de Liga, es claro: “Estoy de acuerdo con el mensaje de Óscar Valentín. Son 9 finales”. Y es que cada punto es oro para un equipo que quiere asegurarse sus objetivos.
El míster también dejó espacio para hablar de la afición vallecana y su importancia: “Ganar en Vallecas es sinónimo de doble alegría por los tres puntos y ver a los rayistas sonreír”. Un guiño a los suyos que deja claro lo importante que es el factor campo en esta fase de la temporada.
En el apartado individual, el técnico ha habado en tono distendido de un nombre al que siguen con atención los pericos, RDT. “He visto que Raúl de Tomás ha cambiado de look. Le queda bien a él, pero yo no me veo”, ha dicho antes de matizar, “ojalá sea un estímulo, aparte de las buenas sensaciones que está teniendo”. Sobre la enfermería, confirmó la disponibilidad de Álvaro García para el partido: “Está bien y está disponible para mañana”.
Por último, Íñigo Pérez habló del pasado del equipo y de esa sensación de vértigo cuando se pelea por algo grande: “Aquella temporada con Iraola quizás hubo vértigo. No fuimos capaces de ganar aquellos partidos que te permiten estar en esos objetivos”.