Uno de los temas que preocupa en el seno del espanyolismo es el estado de Javi Puado, cuya lesión ha condicionado completamente el último mes del Espanyol. TEl capitán del equipo sufrió una entorsis en la rodilla derecha con afectación a los ligamentos cruzados, sin llegar a ser una rotura, lo que resume bien la gravedad del susto que saltó aquel 8 de octubre en un entrenamiento.
Desde entonces, Puado ya se ha perdido cuatro partidos de Liga, y los números cantan solos: con él, el Espanyol cayó solo ante Real Madrid y Betis en ocho jornadas; sin él, han llegado dos derrotas más Alavés y Villarreal- en apenas cuatro partidos. Eso ya dice bastante.
Una pieza clave para Manolo González
Puado no es un jugador cualquiera. Llevaba dos goles, era titular en todos los encuentros de Liga y representa ese tipo de futbolista que sostiene al equipo aunque no esté marcando cada semana. Manolo González lo ha defendido siempre a capa y espada: no es para menos, fue él quien firmó los goles del último ascenso y de la permanencia.
Aun así, el Espanyol ha tirado como ha podido. Con Pere Milla ocupando su zona izquierda, el equipo ha sumado dos victorias y dos derrotas, con cuatro goles a favor. Solo ante el Villarreal los blanquiazules se quedaron a cero.
Cinco semanas de baja y una lesión complicada
Aquí llega la novedad que ha publicado Quique Iglesias de Esports COPE. Puado cumple ya cinco semanas fuera de los terrenos de juego y su dolencia no permite atajos. Desde el primer día está siendo tratado por el equipo del doctor Ramon Cugat junto a los servicios médicos del club, aplicando incluso tratamiento con células madre.
Según explica Iglesias, Puado está poniendo a tono su rodilla a buen ritmo y en orden, pero también añade que no parece que los presagios de unas ocho semanas de baja puedan cumplirse. Traducido: la mejora existe, pero el proceso irá para largo.
¿Cuándo volverá Puado? La pregunta sin respuesta
El periodista es claro: nadie quiere aventurarse. Pasadas cinco semanas, la previsión inicial -unas ocho semanas de baja- no parece realista. La vuelta podría acercarse a la última jornada de 2025, justo antes del parón navideño. En ese tramo el Espanyol visitará San Mamés, y después de Año Nuevo recibirá al Barcelona en Cornellà.
“De momento no hace trabajo de campo con el resto de sus compañeros”, remarca Iglesias. Y eso ya indica por sí solo que aún queda recorrido. Mientras tanto, el Espanyol seguirá esperando a su capitán, porque en este equipo Puado es mucho más que un delantero: es el pulso del vestuario.
