Mundo Deportivo publica este sábado que el FC Barcelona estaría valorando seriamente la posibilidad de intentar en los próximos días el fichaje de Joan García, actual guardameta del RCD Espanyol. Según la información firmada por Ferran Martínez y Fernando Polo, tanto Deco como Hansi Flick coincidirían en que el portero perico encajaría perfectamente en el perfil que el club azulgrana busca para reforzar su portería de cara a la próxima temporada.
Joan García, de 24 años, habría despertado el interés del Barça por su rendimiento consolidado en Primera división, su proyección y una cláusula de rescisión que, a día de hoy, asciende a 25 millones de euros, que pueden ser 30 si el lunes Luis de la Fuente lo llama para la selección nacional. Una cifra que desde el entorno culé se consideraría asumible si se tiene en cuenta el nivel del futbolista y la situación del Espanyol, que asume como necesaria su salida.
El Barça, de acuerdo con esta información, estaría en un momento de redefinición en su portería. Ter Stegen, con 33 años y recién recuperado de una lesión de rodilla, seguiría siendo el referente bajo palos, pero su estado físico y la necesidad de planificar el relevo generacional habrían llevado al área deportiva a mover ficha. Iñaki Peña, sin la confianza del nuevo técnico, y Szczesny, que aún no habría respondido a la oferta de renovación, generarían un contexto en el que la llegada de un nuevo portero cobraría fuerza. En este contexto, Joan García sería considerado una “oportunidad de mercado”.
El perfil del guardameta catalán —joven, alto (1,91 metros), con experiencia y capacidad para decidir partidos con sus intervenciones— respondería al retrato robot que manejaría Deco. Además, el hecho de que Joan conoce perfectamente la competición española y está asentado en LaLiga añadiría valor a su candidatura.
Pese a que el Barça no habría formalizado todavía ninguna oferta, sí habría recabado toda la información posible sobre su situación contractual y personal. Joan tiene los mismos agentes de Dani Olmo—, lo que consideran facilitaría las conversaciones. Además, su nombre ya ha estado en la lista de futuribles que manejaba la secretaría técnica azulgrana hace meses.
El principal escollo, más allá de lo económico, podría ser el componente emocional. Joan García está muy vinculado al Espanyol, club al que llegó siendo juvenil y donde ha crecido hasta consolidarse como uno de los porteros más solventes del campeonato. La afición blanquiazul le ha mostrado recientemente su cariño de forma masiva tras la victoria frente a Las Palmas que selló la permanencia. Además, el hecho de que el interés provenga del eterno rival podría plantearle un conflicto interno.
Aun así, Mundo Deportivo sostiene que el portero estaría valorando dar un salto cualitativo en su carrera. Jugar en Champions, aspirar a títulos y tener mayor visibilidad de cara a futuras convocatorias con la selección española serían elementos que podrían pesar en su decisión.