El protagonista este viernes en La Opinión del Día de La Grada Ràdio fue César Santos, y lo cierto es que dejó un puñado de reflexiones con las que muchos aficionados del Espanyol se sentirán rápidamente identificados. Porque sí, la temporada ha terminado, pero el runrún no ha parado ni un segundo. Y si alguien pensaba que las aguas bajarían tranquilas tras la salvación, que se lo haga mirar: estamos en plena tormenta mediática.
César lo dejó claro desde el minuto uno: “Vaya semanita hemos vivido. No estoy aún ni en modo mercato ni nada, porque aún estoy celebrando y degustando la gran tarde que vivimos el sábado pasado en el estadio”. Y no es para menos. Lo que se vivió ante Las Palmas fue más que un partido. Fue una liberación. Y también una fiesta. “Momentos como estos son imanes para hacer nuevos pericos, y para hacer afición. Porque aunque tuvimos que padecer demasiado para conseguir el objetivo, cuando se logra así, da más gusto”.
Pero claro, la fiesta ha durado poco. El foco mediático se ha desplazado rápidamente hacia Joan García y su incierto futuro. Y ahí es donde César fue especialmente contundente: “El tema que está siendo protagonista esta semana es Joan García. Dicen que los pericos no importamos a nadie, que somos unos acomplejados y que estamos obsesionados con el Barça”. Y soltó la pregunta clave: “Yo no sé quiénes son los obsesionados, si nosotros o aquellos que, habiendo ganado Liga y Copa, están pendientes durante una semana entera de si bajamos a Segunda división, se van a dormir con dolor de barriga porque nos salvamos y ahora están babeando por nuestro portero, para intentar llevárselo”.
Frente a ese ruido, César lo tiene claro: confía en Joan. Cree que su destino está en la Premier League, y no en el eterno rival. “Creo que gran parte de este follón que se está formando es una bola de humo para tocar un poco la moral de los pericos, porque a los culés les da rabia que nos hayamos salvado y nos quieren amargar esta semana. Pero no lo lograrán”.
Y sobre el futuro deportivo del Espanyol, el análisis fue directo y sin excesos de optimismo. César valoró positivamente el trabajo de Fran Garagarza, pero apuntó que ahora llega el verdadero examen: “Por lo que respecta a nuestro mercado y a la rueda de prensa de Fran Garagarza, no podemos sacar nada en claro”. Aun así, mostró confianza en las renovaciones clave: “Me gusta que estén luchando por la continuidad de cedidos clave como Roberto o Carlos Romero”.
Y cerró con una reflexión que muchos comparten: “Confío en que, si con cero euros Garagarza —que ha hecho un buen trabajo porque al final lo ha podido salvar—, con un poco más de inversión y un pequeño esfuerzo por parte de la propiedad, podamos dar un pequeño paso adelante. Que en lugar de lograr la permanencia en la última jornada, sea en la 36”. Más claro, imposible.
Ahora que arranca un verano que se promete intenso, el mensaje de César tiene algo de advertencia, pero también de esperanza. El Espanyol ha evitado el abismo. Pero quedarse ahí, celebrando simplemente no caer, no puede ser suficiente.