Sólo lleva tres partidos esta temporada bajo palos con el primer equipo del Espanyol, pero ha sido tiempo suficiente para ver una versión muy mejorada de Joan García. Un detalle que habla muy bien de la seguridad y confianza del joven meta perico está en cómo aguantó estoicamente los insultos de un reducido grupo de radicales del Real Zaragoza -para nada se puede hacer extensiva esta muy minoritaria actitud al grueso de la afición blanquilla, cuyo comportamiento fue ejemplar, y como muestra como durante el minuto 21 todo el estadio aragonés aplaudió y recordó la figura del eterno capitán del Espanyol, Dani Jarque-, durante diferentes fases del encuentro. Así lo refleja el Informe de incidencias del partido, base para que LaLiga haya denunciado esos repetimos minoritarios comportamientos:
- En el minuto 27, un grupo de aficionados locales, ubicados en la grada de animación, situada en Grada Gol Norte, entonaron de forma coral y coordinada, durante aproximadamente 10 segundos, el cántico: “Hijo de puta, es un hijo de puta”, presuntamente a un jugador visitante.
- En el minuto 30, un grupo de aficionados locales, ubicados en la grada de animación, situada en Grada Gol Norte, entonaron de forma coral y coordinada, durante aproximadamente 7 segundos, el cántico: “ese linier, que hijo puta es”.
- En el minuto 45+4, un grupo de aficionados locales, ubicados en la grada de animación, situada en Grada Gol Norte, entonaron de forma coral y coordinada, durante aproximadamente 6 segundos, el cántico: “Eh, cabrón”, durante un saque de meta del portero visitante.
- En el minuto 60, un grupo de aficionados locales, ubicados en la grada de animación, situada en Grada Gol Norte, entonaron de forma coral y coordinada, durante aproximadamente 6 segundos, el cántico: “Que lo vengan a ver, eso no es un portero, es una puta de cabaret”, en referencia al portero visitante.
