Este jueves, en La Grada Ràdio, se ha respirado ambiente de previa. El Oviedo – Espanyol del viernes no es una final, pero huele a cruce de caminos. Por eso, la tertulia ha sido de las intensas, con voces que conocen el paño y no se guardan nada. Han pasado por los micros Robert Hernando, Mateu Ponce, Ricardo Martínez e Iván Gómez, con Francesc Via dirigiendo el debate como siempre. Además, se ha sumado por videollamada el periodista Juan Velázquez, especialista en el día a día del Real Oviedo.
El partido ideal para agitar el once
Ricardo Martínez ha arrancado fuerte: “Si tenemos un partido para inventar y hacer magia es éste, jo cambiaría a Dmitrovic, y sacaría a Terrats, que no ha tenido tiempo de demostrar”. Un mensaje claro: el equipo necesita agitarse un poco, probar cosas nuevas, y este partido -entre presión, dudas y contexto- podría ser el campo de pruebas ideal para recuperar confianza y oxígeno.
Ilusión contenida, pero con la urgencia como telón de fondo
Iván Gómez ha querido enfocar el momento desde el punto de vista de quien aún cree, pero no puede ignorar el peso de los números: “Ilusionado y con ganas de ver al Espanyol; es un partido transcendental, venimos de un 2 de 13 y tenemos dos partidos en teoría asequibles”.
El mensaje es evidente: ya no vale solo jugar bien. Hay que puntuar, sumar de tres, y dejar claro que este equipo no se conforma con sensaciones bonitas.
Via y la anécdota que humaniza a Alan Pace
En un momento más distendido, Francesc Via compartió una historia que sirve para aterrizar la figura del nuevo dueño del club, Alan Pace, en un contexto más cotidiano: “Al entrar y al salir del estadio del Burnley, se nos acercó un chico magrebí que decía que era de Cornellà y nos dijo que trabaja en el parking de Turf Moor, y nos iba diciendo éste es el coche de Pace y demás. Nos dijo que Burnley es muy feo y había mucho yonkie, y nos dijo que la gente de dinero como Pace vivía en las afueras, que son muy bonitas, tipo campiña inglesa”.
Robert Hernando, directo y con retranca, lo resumió así: “Entre Burnley y Barcelona, Pace debería vivir más tiempo aquí, no hay color”.
Y no le falta razón.
Juan Velázquez: «El lío con Carrión en Oviedo es real»
Cuando el foco se trasladó a Oviedo, la intervención del periodista Juan Velázquez fue clave para entender la tensión previa al partido. No se mordió la lengua: “Nadie entiende la destitución de Paunovic, se intentó vender como un tema de resultados pero es que te has enfrentado a tres de los primeros, y al Elche que llegaba invicto. De los 5 partidos igualados que tenías te llevaste dos, la gente no lo entiende”.
La sensación que dejó es clara: el vestuario no estaba roto y el ambiente se ha enrarecido más con el fichaje de Carrión.
Y es que, según Velázquez, la forma en que Carrión dejó el club en su anterior etapa tampoco ayuda:
“Cuando pretendes salir quedando bien y se descubre que lo tenía todo cerrado dos meses antes del play-off ante la UDLP, la gente se lo va a tomar mal”.
Clima hostil en el Tartiere… y campaña anti-Carrión
Velázquez también explicó cómo puede afectar el ambiente en el estadio: “La afición del Oviedo aprieta, se le va a apretar igual al Espanyol. Hay campañas en redes sociales que incitan a que se silbe a Carrión cuando entre al campo, el ambiente va a estar medianamente tenso”. Se espera ruido, reproches y un entorno que no ayudará precisamente a la calma.
Sobre el sistema, sí se atrevió a augurar un cambio en positivo: “Espero un Oviedo que va a ser más valiente… el cambio en el banquillo va a beneficiar por los perfiles de plantilla que hay, que pueden hacer que lleguen al área rival”.
Pace, Mao y la herencia que no termina de irse
Concluida la llamada, el debate giró hacia Alan Pace y la continuidad de Mao Ye. Robert Hernando puso sobre la mesa la dualidad que muchos sienten: “Por un lado he visto gente demasiado pesimista y otra eufórica, hay que ponderarlo. Una ventaja que tenemos con su llegada es el hecho de poder hablar con este hombre… En empatía y proximidad hemos ganado. Y entiendo que a la gente moleste el tema de Mao Ye”.
El sentir general es que Mao resta más que suma, y que su continuidad chirría con el mensaje de cambio.
Francesc Via aportó contexto: “Ya no ejecutaba con Chen Yansheng, tampoco lo hará ahora. Este club sólo se podía vender con unas condiciones del vendedor… una de las condiciones pasa por ahí, nos guste o no”. Y remató respecto a este malestar que está presente en la pericada por la continuidad del directivo: “Estéticamente lo entiendo, pero pragmáticamente, no me preocuparía tanto”.
Debate caliente sobre la figura de Mao
Hernando volvió a la carga, con dureza: “Lo que no entiendo es tener esa rémora de Rastar aquí”,
mientras que Ricardo optó por una visión más pragmática: “Mao es un buen administrador que se ha tenido que comer las mierdas de Chen, le doy algo de crédito”.
Mateu, sin medias tintas, ponía en duda qué tiene de positivo esta decisión: “Lo de Mao nos ha hecho bajar el soufflé a todos, pensábamos que iba a ser borrón y cuenta nueva”, e Iván cerró con sarcasmo respecto a la herencia que dejar la Rastar de los últimos tiempos: “El último comunicado de Chen era lamentable, parecía hecho con IA”.
¿Y ahora qué pinta Mao?
Via lo explicó sin rodeos: “Mao va a seguir las directrices de Brad Spiby y del consejo que se formará en un mes… ahora como mucho lo será de Pace, pero no va a mandar en nada”.
Hernando seguía en sus trece, con un dardo directo a la capacidad profesional del CEO: “Mao no está capacitado para llevar una empresa como el Espanyol, está aquí porque era el traductor del despacho de Rousaud”.
Via remató: “Con Pace pronto vamos a tener ocasión de hablar con él, y le preguntaremos sobre Mao, su papel y sus funciones”.
Marca, ingresos y objetivos a corto plazo
Hernando introdujo un dato clave que irá marcando el ritmo y permitirá evaluar si las cosas siguen igual, o pese a la presencia de Mao sí hay un cambio a mejor: “Si no conseguimos un patrocinador para el club en seis meses y otro para la camiseta en un año, veremos cómo funciona el club”.
El verdadero termómetro no será lo que se diga… sino lo que se facture.
De nuevo el Tartiere, de nuevo la tensión
Cerrando este tema de Mao, Via recordó su experiencia en el playoff ante el Oviedo a la hora de abordar el tema del ambiente que se encontrará el equipo en Asturias: “He vivido dos realidades en el Tartiere… hasta el gol del Oviedo, que fue una cagada de Joan García, no había pasado nada, a partir de ahí se crecieron y el Tartiere fue a saco”.
Hernando avisó del peligro: “Puede que después de acusarles de hacer la cama al antiguo entrenador salgan muy enchufados”, y Ricardo planteó lo contrario: “También puede pasar lo contrario, que salgan cagados… ¿Cuántos partidos va a tener de confianza Carrión?”
México, Pachuca y el miedo a hacer de “equipo aspirina”
Ricardo, mexicano, se mojó sobre Jesús Martínez y el Grupo Pachuca, que ha visitado Asturias con intención de apaciguar unas aguas que bajan revueltas, y llegó a hablar de Europa como objetivo de este Oviedo: “Tiene un discurso de vender humo… no tiene tanto músculo para invertir en Europa, está haciendo un poco el Chen”. Y lanzó el grito que todos comparten, aunque hizo un simil que sin duda no guatará nada a Manolo González: “Lo único que me preocupa es que el Espanyol no haga de equipo aspirina”.
Final de tertulia con exigencia y fe
Mateu cerró con lo que debe ser la consigna: “El Espanyol ha de ir a hacer lo suyo y a ganar”. Hernando, más práctico: “Hemos de intentar ir a Oviedo y sacar tres puntos que serían balsámicos”. Iván, rotundo, reconocía que a su parecer “todo lo que no sea una victoria nos va a saber a poco”, Mateu, otra vez, a lo suyo: “Los jugadores son valientes y saldrán a tope”. Que así sea.