El Espanyol ha anunciado la contratación de Luis García como nuevo entrenador. El asturiano firma con el conjunto catalán hasta 2024. La presentación del técnico está prevista para este martes 4 de abril a las 13:30 horas en el auditorio Juan Segura Palomares del RCDE Stadium. El nuevo míster perico se estrenará en el cargo el próximo sábado 8 en el duelo que mide al Espanyol con el Athletic Club en Cornellà. Este compromiso será la primera oportunidad de Luis García para empezar a revertir la situación del cuadro catalán, que se sitúa al borde del descenso. De hecho, está empatado con la UD Almería, uno de los equipos que sujetan los farolillos rojos de LaLiga Santander.
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— RCD Espanyol de Barcelona (@RCDEspanyol) April 3, 2023
El nuevo entrenador del RCDE sabe lo que es vivir situaciones complicadas con el Espanyol. Al menos, como jugador. El asturiano vistió la zamarra blanquiazul a lo largo de seis campañas, de la temporada 2005-06 a la 2010-11, en las que se empapó de sentimiento espanyolista. “Lo mejor de Barcelona es ser del Espanyol“, llegó a decir, en una frase que caló hondo en la masa social. Ahora, 13 temporadas después, regresa como técnico para suplir a Diego Martínez en una nueva situación complicada.
Ha dicho en multitud de ocasiones Luis García que uno de sus objetivos era convertirse en entrenador del primer equipo del Espanyol, pero a buen seguro que no esperaba que le llegara a estas alturas, cuando se encontraba entrenando al RSC Internacional, tercer equipo del Real Madrid, en Tercera RFEF, quinta categoría del fútbol español. Era su segunda aventura como entrenador tras dirigir con éxito a la Damm CF durante tres campañas, y también ha estado a la altura: tenía al equipo en segunda posición y suma 15 partidos sin perder.
El caso de Luis García recuerda al de Mauricio Pochettino en la campaña 2008-09. En aquel momento, el argentino era el ayudante del Espanyol Femenino y cogió las riendas del primer equipo cuando el cuadro blanquiazul estaba a ocho puntos de la salvación, casi desahuciado, y lo salvó. La situación actual no es tan grave, pero el símil por la inexperiencia en la élite existe.