Entre tanta fiesta copera en Sevilla, con la finalísima que acapara todos los focos este fin de semana, hay un duelo pendiente que, para nosotros, pericos, vale su peso en oro. El Espanyol visita este domingo (en horario de siesta, las 16:15 horas) el Estadio de la Cerámica para medirse al Villarreal en ese partido que se suspendió hace casi dos meses por las dichosas lluvias. Sí, aquel famoso tres de marzo en el que al final no llovió tanto, pero el choque quedó aplazado igual. Desde entonces, la película ha cambiado bastante: nosotros, que entonces andábamos pendientes del retrovisor para alejarnos del descenso, ahora soñamos con la Conference League; ellos, los groguets, se han descolgado del tren de cabeza y parece que sólo les queda amarrar la quinta plaza, la última que da acceso a Champions, que han perdido al menos provisionalmente tras el triunfo del Betis ante el Valladolid. Todo esto gracias al trabajo de Manolo González, nuestro míster, que firmó en Mestalla contra el Valencia (1-1) su partido número 50 al frente del primer equipo. Casi nada. Y lo hizo a lo grande, horas después de ser nombrado mejor técnico de abril por LaLiga. Para que luego digan que no era un entrenador para Primera.
Desde que cogió las riendas tras la destitución de Ramis, ha hecho magia con una plantilla humilde, moldeando un equipo sólido, competitivo y valiente. Este equipo ha aprendido a sufrir y a competir, dos cosas que valen oro en esta Liga tan apretada. El vestuario está a muerte con Manolo, y la afición, también. Hay conexión, hay confianza, y hay ambición. Pero el gallego no quiere relajarse ni un pelo: “Todavía debemos rematar el trabajo”, insiste cada vez que tiene ocasión. 39 puntos nos colocan en una buena posición, pero mientras no esté sellada la permanencia, no hay lugar para las celebraciones. Eso sí, una victoria en Villarreal, además de dejarnos ya casi matemáticamente en Primera, nos metería de lleno en la pelea por Europa. Casi nada.
Altas y bajas: caso Carlos Romero: “Altas y bajas, José Gragera y Brian Oliván están fuera. Sergi Gómez si no pasa nada hoy estará con el grupo. Y Carlos Romero va a estar mañana, va convocado y va a jugar de inicio”.
Ganar en Villarreal son 42 puntos, a dos del octavo, Europa: “Primero vamos a salvarnos, luego vamos a ganar en Villarreal, que es una tarea más que complicada por el nivel del rival, en su campo son fuertes, llevan dos partidos que no han ganado pero en Vigo jugaron con 10 y ante la Real sin desmerecerlo, el Villarreal hizo un partido para ganar bien. Es un equipo que genera mucho, va a ser un partido exigente”.
Bajas importantes en el Villarreal: Baena, Albiol, Gerard…: “No me hace cambiar mucho la manera de jugar el partido, lo hemos planteado tanto si estuviesen como si no, al final el jugador que pongan tiene nivel, con diferentes situaciones de juego pero son jugadores con un potencial muy grande. Cuando un equipo está a estas alturas de Liga donde están ellos, es por algo. Hemos planteado el partido para ganarlo, pero teniendo en cuenta sus puntos fuertes, que tiene muchos, nos pueden hacer mucho daño”.
Muy cerca de la permanencia, podría certificarse mañana; ¿sorprende llegar a estas alturas de temporada con el equipo como está, supera sus expectativas?: “Las supera en mucho, no hemos engañado a la gente, desde el inicio dijimos que sería un año muy complicado. Cuando sales a hablar el primer día y dices eso ya sabes que te pueden venir palos de todos lados, pero ya dije que no mentiría ala afición: el año sería duro, lo está siendo, y si lo podemos arreglar faltando cinco jornadas mejor. Si en enero nos dicen que faltando 5 jornadas estamos donde estamos, todo aquel con un poco de entendederas lo hubiese firmado, es un éxito de los jugadores que han hecho un trabajo espectacular, son los principales protagonistas y sin su trabajo los demás no haríamos nada”.
¿Tienen opciones reales de participar Gragera u Oliván en este tramo final de Liga?: “Difícil, igual que Pablo Ramón. Hay dos factores, la velocidad que lleva la Liga, que es tremenda, con partidos de ritmo muy alto, el partido de mañana se ha planteado a 90 minutos, no a 45. Entonces, es complicado, porque el nivel de entrenos ya te excluye, el nivel y el ritmo son tan fuertes que al jugador que no va a este ritmo le cuesta y le canta mucho la gallina. Es difícil reengancharse, además el equipo gana y los reservas están dando un buen rendimiento”.
Carlos Romero: “A nivel ofensivo lo teníamos valorado, es bueno en interpretación y toma de decisiones, pero no hemos de olvidarnos que es un defensa, y como el fútbol evoluciona nos olvidamos que un defensa lo primero ha de defender. Él tenía un problema que nos costaba goles, lo hemos hablado con él, y ha dado un paso adelante importante. Es mejor jugador respecto a cómo empezó, porque defensivamente ha mejorado mucho. Le hemos ayudado, pero a través de actitud y trabajo ha querido ser mejor, ha puesto mucho interés en ese aspecto en que era más vulnerable”.
¿Qué Villarreal espera?: “Es un partido para tomarse muy en serio, pueden penalizar mucho los errores, al Mallorca le metieron 3 goles en 10 minutos y es un equipazo. Es muy buen equipo, domina las transiciones como pocos, son buenos a pelota parada, es un partido muy complicado que te exige. Lo equiparo en ir al Bernabé, el Camp Nou o el Metropolitano, es dificilísimo, si no estás bien el baño de realidad puede ser importante. Hemos de salir muy enchufados, muy metidos, minimizar los errores y ser efectivos. Hemos de tener balón, no podemos aguantar 90 minutos sólo defendiendo, hay que tener un punto de valentía y tener claro donde poner el balón. Si lo tenemos claro les podemos hacer daño, pero es un partido muy exigente”.
50 partidos en el banquillo: “Ni en los mejores sueños me hubiese esperado estar aquí, estoy muy agradecido a los futbolistas, gracias ea ellos estamos aquí, gracias al cuerop técnico, gracias a Fran Garagarza que apostó por mí y cuando tuvo que apostar más fuerte lo hizo, y gracias a ellos he podido cumplir 50 partidos en un club al que quiero muchísimo y en el que estamos trabajando para que cada día sea mejor. Un sueño, muy feliz, espero que sean muchos más”.
Malestar del Villarreal con el arbitraje, ¿preocupa?: “Espero que no condicione, hemos de dejar ya el tema de los árbitros en general. Lo he hablado en el vestuario, lo puntualizamos mucho desde Mallorca en adelante, te resta energía y fuerza, y no ayuda nada. Es muy complicado pitar, ser árbitro, hay decisiones que nos han perjudicado pero a nivel de vestuario resta fuera y energía. Hemos de hacer nuestro trabajo y si después hay condicionantes externos que no ayudan a ganar no podríamos hacer mucho. Son temas que te sacan del foco, y hemos de estar desde cuerpo técnico y plantilla fuera de este tema”.
Han sonado muchos futuribles; ¿consideras que tras el buen trabajo en la segunda vuelta el Espanyol puede ser más atractivo?: “Considero que sí; a mí me pasa una cosa con los rivales, vienen y te saludan y ven un equipo que juega bien y hace las cosas bien, ven el estadio, que estamos en Barcelona, la masa social, un club con 30.000 personas en el campo y eso es bonito. Hemos de buscar esa imagen de positivismo, de buscar cosas buenas para el club, no un entorno negativo, porque eso se traslada fuera y los jugadores lo notan y se crea un rechazo a venir aquí. Hemos de poner en valor la marca Espanyol, y dar desde dentro un paso adelante y valorar el club en que estamos, si no lo hacemos desde dentro es ya para cagarse”.