A veces el ruido es tan fuerte que parece que alguien haya metido un micro dentro del vestuario. Y en las últimas semanas, Omar El Hilali ha estado justo en medio del altavoz. Que si se va, que si el Como ya viaja con la cláusula en la maleta, que si el Villarreal, que si el Leverkusen… Pero de momento, lo que ha hecho el ’23’ del Espanyol es no moverse. Ni de equipo, ni de su sitio en el campo, ni de su tono siempre calmado y educado.
En una charla con nuestro compañero Sergio Escario, de Mundo Deportivo, El Hilali aclara su situación y deja claro que no está por la labor de despistarse con cantos de sirena. “Estoy leyendo muchas cosas, pero yo estoy con muchas ganas de empezar la temporada y de hacer un año muy bonito. Con la cabeza puesta aquí y muy tranquila”, responde cuando le preguntan por su futuro.
Y eso que razones para estar con la mosca detrás de la oreja no le faltan. Se ha hablado tanto de su marcha que parecía cuestión de horas. Hasta aseguraban que el Como ya estaba de camino a Barcelona con el dinero. Pero ni la cláusula es de 15 millones como se decía por ahí, ni la operación estaba ni cerca. La Grada ya sacó a la luz el dato clave: su cláusula real es de 25 millones de euros. Y de momento al menos, nadie la ha puesto sobre la mesa.
A día de hoy, El Hilali tiene contrato hasta 2027, pero ni se ha renovado ni se está negociando una ampliación. ¿Y eso preocupa? Pues sí. Porque si hay un momento para blindarlo, es ahora. Pero él, de nuevo, lo ve todo desde la calma: “¿SI el club ha hablado conmigo? No, estoy muy tranquilo. Me quedan dos años de contrato, tampoco hay prisa. Ya se verá qué pasa. Suena muy típico, pero el fútbol puede cambiar muy rápido. Yo estoy muy centrado en el Espanyol”.
Lo cierto es que centrado está, y mucho. Se nota en cómo habla de la pretemporada, de lo que pide Manolo González (“acostumbrarse a ganar”) y de cómo afronta este curso que podría terminar, quién sabe, en el Mundial de 2026. “Con muchas ganas, ilusión y con ganas de hacer un año bonito y darle una alegría a nuestra gente”, dice. Y eso que aún no ha marcado un gol como profesional, ni con el primer equipo ni con el filial. “Marqué un gol en un amistoso, en el campo del Prat, me acuerdo”, confiesa entre risas. “Desde que he subido al primer equipo siempre he hecho la salida de tres, con el lateral bajo. Eso dificulta el tema de poder llegar al área contraria. ¡Y en los córners tampoco subo! Creo que soy el jugador de campo que lo tiene más difícil”.
Eso sí, por si acaso llega el momento, tiene clarísima la celebración: “Yo creo que me voy a buguear en el córner (risas). No lo sé, si pasa lo celebro de mil maneras, mezclo todo”.
En cuanto a lo futbolístico, El Hilali también se moja sobre fichajes (“Todos nos dan un plus a la plantilla y elevan esa competitividad que hay dentro”), sobre la marcha de Joan García (“No me esperaba que fuese allí porque no sonó… pero si él consideró que irse al Barça es lo mejor para él, me alegro por él”), y sobre el dorsal 21 de Dani Jarque: “La persona que lo lleve tiene que hacerlo con el mayor orgullo, la mayor ilusión y defenderlo a muerte”.
Y como buen perico, también lanza un mensaje claro sobre Kumbulla y Urko, dos nombres que siguen en el radar del Espanyol: “Kumbulla fue de los mejores centrales de LaLiga, Urko cuando vino en enero ya vimos lo que nos dio. Yo, encantado de que vuelvan a venir”.
Omar El Hilali habla desde la serenidad de quien sabe que está donde quiere estar. Y sí, puede que vengan ofertas, que el mercado se agite y que las cosas cambien. Pero a día de hoy, y con todas las letras, lo dice él: “Estoy muy tranquilo y muy feliz aquí”. Y eso, de momento, vale más que cualquier cláusula.




