El fútbol español tiene un problema cuando la inmensa mayoría de los seguidores a los que pudiéramos preguntar no dan ni una opción (o muy pocas) al Espanyol en el partido de esta noche, pese al 1-0 en un partido de ida que fue una oda a la minuciosidad táctica espanyolista. Quiero decir con lo del problema, que estamos cerca de cargarnos la gallina de los huevos de oro que es, sencillamente, el fútbol. No es ni el Barça ni el Madrid… es el fútbol y su competitividad lo que están mandando ustedes al limbo, señores.
Será por los repartos televisivos que, si bien se van ajustando, todavía no permiten que las plantillas puedan ni siquiera acercarse a ser parejas. Será por que los medios de comunicación que manejan el poder ya han decidido que son culés y merengues los que tiran del carro y tanto da el rival que tengan enfrente, salvo honrosas excepciones como las del Atlético, Sevilla, del ‘guadianesco’ Valencia… Vamos clamorosamente disparados a esa Ligue 1 en Francia en la que dos equipos ‘y medio’ tienen nivel. El resto, comparsas. ¿Saben qué equipo juega contra los Harlem Globetrotters? Son los Washington Generals, a sueldo del propio quinteto de malabaristas. Y saben botar la pelota, sí, y se hacen los locos de maravilla. Algún día les dejaron ganar.
El fútbol español tiene un problema… ¿Sigo?
El fútbol español tiene un problema si el grueso de fichajes invernales de los equipos La Liga se ven seducidos por incorporar a futbolistas saudíes para poder compensar las cuentas del banco y no del vestuario.
El fútbol español tiene un problema desde que se anticipa un fracaso estrepitoso del VAR sin que ni siquiera se haya puesto en marcha.
El fútbol español tiene un problema si el mal de todos los males es un tontainas que tira una bola de papel de aluminio sobre el cuerpo del portero rival.
El fútbol español tiene un problema cuando se sancionan con cuatro perras los insultos y vejaciones de la grada a un rival o árbitro, y no con una pena mayor.
Pero el fútbol tiene un teorema que supera cualquier problema: que se juega 11 contra 11 durante 90 minutos, aunque solo de vez en cuando en el Camp Nou… Y ante esta verdad palmaria nos tenemos que agarrar hoy porque si no, tendríamos un problema.
