Semana rara. Bueno, mejor decir que ha sido intensa a nivel deportivo y político si tenemos en cuenta el asunto Piqué, la democracia y la selección española (que jugó ayer). Y también el referéndum de autodeterminación de Catalunya, el comunicado del club por la situación del país, y el día a día del equipo tras la derrota ante el Real Madrid. Tomemos aire. He de admitir que, aunque era de las optimistas en cuando a la posibilidad de romper las estadísticas en el Bernabéu, me llevé un zas de los buenos. Tras el recuento de votos después de presidir una mesa electoral, el 2-0 me devolvió a la realidad a la velocidad del rayo.
El lunes, mientras recuperaba una cierta normalidad emocional, volví al trabajo y a seguir la actualidad de mi querido RCDE. Celebro que el Tottenham se arrepienta de haber soltado a Pau. Para suerte nuestra, está en un gran momento de forma. También celebro la recuperación de Óscar Duarte. ¡Tiempo récord! Problema ahora para QSF, a ver dónde coloca a David López. Lo que no sé si me hace tanta gracia, es que la prensa diga que nuestro míster sería una prioridad para el banquillo del West Ham la temporada que viene.
Celebro muchísimo que Gerard Moreno esté on fire. Dice que si le marca dos goles al Levante, invita a cenar a la plantilla. Hombre, ¡qué poco generoso! Gerard, estírate con la afición, ¿no? Como premio de asistencia al campo, a ver si remontamos en ese capítulo. Por cierto, me genera dudas el ‘ofertón’ como el de la semana que viene (entradas a 5 euros para menores de 15 años, abonados o no). No sé si convienen en este momento, cuando la Liga no ha hecho más que empezar. En mi opinión, los aficionados no se consiguen a base de ofrecer saldos. Esta promoción me parece más una acción para maquillar la entrada de un partido de horario nefasto en viernes. Hay que buscar acciones alternativas para que los 27.000 socios que ya hay sean los que vayan al campo cada partido. Y después, el resto, será también bienvenido a la fiesta para conseguir el ‘lleno hasta la bandera’.