A l conocer el nombre de Cerberus supongo que la mayoría habréis tenido la misma tentación que yo: preguntarle a ‘San Google’ quiénes son estos chicos. Y entre otras cosas habréis visto que han ganado un pastón comercializando ‘activos tóxicos’ de Bankia. Sí, señores, en este momento somos un ‘activo tóxico’ más que se expone, por su debilidad, a ser adquirido por los especialistas en comprar duros a cuatro pesetas. Perdón, euros. También hemos oído hablar de un gran fondo de inversión chino, Fosun, al que parece sobrarle la pasta porque ‘amenazan’ con descolgarse con una ampliación de capital de la friolera de 100 millones de euros, con lo que dejarían el ‘patio’ de accionistas como un solar. Lo mejor sería podernos beber una ‘Cerbe-sun’ sumando ambas propuestas, si se me permite el chiste malo.
Y la pregunta es, claro está: ¿Qué nos conviene más? Bueno, a Dani-Condal los chinos, porque pagan más. El resto poco podemos opinar al respecto porque no tenemos toda la información.
Al parecer, los de Genética Perica ven con buenos ojos la llegada de Cerberus, entre otras cosas porque los trajeron ellos, y porque con la venta a ese fondo darán un paso al frente y tomarán las riendas del club. Una cosa está clara, Dani y Condal ya han dejado patente que no quieren seguir ‘mandando’ y que lo que quieren es recuperar sus avales y disfrutar del fútbol desde sus asientos. Y si eso ocurre, en el panorama accionarial del Espanyol solo quedará Genética Perica, como grupo organizado, por lo que nadie les discutirá su posición de poder y se habrán ganado a pulso su oportunidad.
A pesar de que la presión de Hacienda parece correr a favor de Cerberus, ya que estos ya han puesto sobre la mesa de Dani una propuesta por escrito, no sería extraño que el ex presidente se sacará un conejo de la chistera en el último momento, como acostumbra, y dejara a todos con un pam de nassos.
Esperemos que esta bola de nieve no siga creciendo y se convierta en otra arma arrojadiza entre una afición demasiado dividida ya. Por encima de personalismos y de ‘a ver quién la tiene más larga’ está el futuro del Espanyol, y si quieren que los aficionados y accionistas tomemos parte, que nos expliquen con todo detalle los pormenores de la operación. Si, en cambio, la cosa se queda en un ‘asunto particular’, que no jueguen con nosotros.
Ah, me olvidaba. Llegado a este punto en el que poco o nada podemos decir los socios y accionistas de a pie ante la inminente venta del club de nuestros amores, yo también quiero ser el Manchester ‘Citynyol’. Por pedir, que no quede.