Todo empezó en julio del 98. El club decidió apostar por la Intertoto y Marcelo Bielsa planificó una plantilla formada por una mayoría de canteranos que unos días antes habían intentado ascender a Segunda A, para superar las primeras rondas de una incipiente competición europea. Una joven e inexperta plantilla dirigida por Paco Flores hizo vibrar a una grada que siempre había pedido sin éxito la presencia de canteranos en el primer equipo. De Lucas, Morales, Tamudo, Capdevila, Nieto, David Sánchez o Argensó pasaron dos rondas y cayeron ante el Valencia. Ese torneo fue la confirmación de que el club debía apostar por la base, que debía ser valiente con la gente de la casa. ¡Qué fácil es decirlo y qué difícil llevarlo a la práctica!
El pasado jueves, el Espanyol derrotaba al Lucerna en el partido de ida de una compleja fase previa de la Europa League por un rotundo 0-3, con la presencia en el equipo titular de siete canteranos. El grupo ofreció el triunfo a Dani Jarque, justamente el día del décimo aniversario de su llorada muerte.
¡Qué rápido pasa el tiempo! Recuerdo un paseo por Gelsenkirchen -antes del duelo ante el Schalke en la UEFA del 2005-06- junto a Xavi ‘Mágico’ Díaz, el representante de Dani, en el que comentábamos el futuro del número 21. Xavi hablaba con pasión de las ganas que tenía el central de jugar en un Espanyol grande y ambicioso, de competir de tú a tú con los mejores. Nos eliminó el cuadro alemán, pero al año siguiente, Jarque (23 años) formaba el eje central de la defensa junto a Marc Torrejón (21 años) -dos chicos con personalidad- en la final de la UEFA en Hampden Park. Seis canteranos fueron titulares (Gorka, Jarque, Torrejón, David García, Moisés y Tamudo) ante el Sevilla. El Espanyol perdió en los penaltis. Luis, Jonatas y Torrejón fallaron desde los 11 metros. Dicen que Marc estuvo mucho tiempo pensando en ese maldito fallo ante Palop. No sé si aún sigues jugando en Alemania, pero es de alabar que un chaval de 21 años decidiera tirar un penalti en una final europea. Supongo que a más de uno le temblaron las piernas.
Si el Espanyol pasa la fase previa y entra en el bombo del 28 de agosto, afrontará un complicado curso con tres frentes abiertos: liga, Copa y UEFA. Yo siempre he sido partidario de apostar por la liga, que es la competición que da de comer al club. No quiero que se repita aquel final del 2006. Buen rendimiento en la UEFA, campeones de Copa en abril y petardazo en la liga. El Espanyol estuvo 13 minutos descendido…, hasta que llegó el agónico gol de Coro. Patadón de Jarque, cabezazo del ‘rifle’ Pandiani y definición de Coro. Lo ven, en el tanto más importante de la reciente historia blanquiazul, aparecen dos canteranos.
Pues eso, yo quiero un Espanyol que gane en la liga… con gente de la casa. Y David Gallego también.
