Si usted es de los que disfrutan desayunando mientras lee este diario, sepa usted que se está jugando en estos momentos el segundo amistoso de pretemporada contra el Rayo. Lo digo por si se ha despistado. Pero no se preocupe, siga leyendo el artículo que ya le dará tiempo de dormir la siesta del carnero en el segundo tiempo. Y poca broma con los amistosos que los carga el diablo. Nos sabemos la lección de memoria: las pretemporadas están para sudar, ponerse en forma y acoplar al equipo. Lo que ustedes quieran, pero aún así queremos ganar, ya se juegue contra el Peralada como antaño o contra el Rayo como hoy. Y conocemos también la retahíla de excusas que suceden a toda derrota estival: el calor, el rival más rodado, el palizón físico. Correcto. Y por último, que no hay que sacar conclusiones. Pero si me dieran un euro cada vez que un equipo ha acelerado sus gestiones de mercado tras un tropiezo veraniego, podría jubilarme hoy mismo.
Y después de las sensaciones que dejó el equipo ante la UD Las Palmas, pues todavía mas. Estuvimos lentos, previsibles y fallones. Cabrera, que como a todo buen uruguayo le adornan las virtudes del carácter y el buen léxico, dijo que no habíamos estado finos en las áreas. Era un eufemismo para decir que en defensa fuimos unas madres y que lo que falló Wu Lei al final, solo, más solo de lo que un chino ha estado jamás en la historia, no tiene perdón de Buda o de Confucio. Lo de este chico es muy preocupante porque es como el caso de Benjamin Button en lo futbolístico. Si aquél nació ya viejo y se fue haciendo joven, con el bueno de Wu va pasando el tiempo y cada vez parece peor jugador. Cuando llegó era un ágil dragón y tres años después parece una tortuga con reuma. Encuentra huecos de maravilla salvo el que hay entre los tres palos.
Pero bueno, culpar a Wu Lei sería injustísimo teniendo en cuenta el rosario de despropósitos que vimos ante a UD Las Palmas perpetradas por el grupo de sospechosos habituales. No es que los teóricos titulares estuviesen muy finos, pero los que opositan a seguir vistiendo la camiseta del Espanyol siguen sin darnos todavía una buena razón para ello y volvieron a desesperarnos. Veremos si hoy la cosa mejora, pero si no lo hace, aplíquense las excusas sugeridas en el primer párrafo. Solo hay una cosa que no va a cambiar sea cual sea el resultado, y es que el equipo necesita refuerzos al margen de los que suceda en los amistosos. Aunque se gane el de hoy y los de la semana que viene ante Granada y Cádiz, seguiremos tentando a la suerte si no apuntalamos el equipo con firmeza. Especialmente hay que añadir cemento en las grietas defensivas del equipo. Hay que traer centímetros y músculo en jugadores que sean capaces de ganar duelos y choques. Hay que fichar de mediocampo hacia abajo y traer un mínimo de dos o tres piezas que nos otorguen seguridad detrás. El Espanyol de los 25 puntos se fraguó con dos defectos fatídicos, mortales, la fragilidad defensiva y la falta de gol. De lo segundo, honestamente, no andamos tan mal. Pocos equipos de primera tiene un RDT, un Embarba o un Puado. Pero lo primero sigue siendo tarea pendiente y es precisamente en lo que no puede fallar un equipo que aspira a salvar los muebles. Ahora sí, hemos terminado. Pueden poner la tele, a ver si los hombres de Vicente me llevan la contraria y podemos empezar el fin de semana con alegría.
Como Bill Murray en aquella excelente película, vivimos atrapados en el tiempo. Año tras años se repite la misma historia durante el mercado de fichajes……..fichamos mal y tarde. Antes era por la triste economía y debíamos esperar a que los otros equipos ficharan y traer las migajas que dejaban. Ahora que hay cash, senos complica por el límite salarial. Hemos de esperar a ver si alguien nos hace use hace el favor de largarse para poder fichar algo. Y mientras nosotros estamos esperando, las mejores cartas se las están llevando nuestros rivales.
Al final como en casi todas las parcelas de la vida la ideosincracia se acaba imponiendo. Y la nuestra es la de ser un club mal gestionado, unas veces por la economía y otras por la deportiva. El año que consigamos tener un buen gestor económico y un gran director deportivo……….ese año al Espanyoll le crecerán los enanos en otra parcela. Como dije antes……..vivimos atrapados en el tiempo.
Es que no cal que ens diguin res. Faltan 8 tíos. Sobren 8 tíos. Ni un, ni dos, ni tres….És que no ho veuen????
El 11 ideal de Via son 10 Keidi Bares y RDT en punta.