W hite Hart Lane. El lujo de la pretemporada para la RCDE people. Partido de Premier, escenario tremendo y rival de muchísima entidad para calibrar al Aguirre Team a nueve días del inicio de curso. Todo fantástico, y aunque lo ideal sería jugarlo hacia final de temporada, con banda sonora rimbombante y el vértigo de las eliminatorias europeas, la cita resulta estimulante. Los Spurs de Villas-Boas supondrán la prueba del algodón definitiva para el Espanyol a nueve días para el inicio de Liga. Sparring dinámico y fuerte, un termómetro total. Incluso de cara al final del mercato.
Puede ser el gran día para ver cómo mezcla el once tipo. Se le pedía a Aguirre y al nuevo Espanyol más generación de ocasiones; por ahora, sólo por vía directa. Pero conviene una mayor conexión entre los más peloteros del equipo. En Girona ya vimos un Sergio García con querencia a buscar a Lanza, algo natural. El exarlequinado en algún momento se disfrazó de Verdú y faltaría verle más en esa faceta interesante. Y más con Pizzi por delante y la explosividad que pueda aportar Thievy. Todos ellos pasarán hoy un duro examen, pero el ánimo para superarlo es ahora mucho mejor, una vez suspendido el viaje a Trípoli. A-libia-dos, ciertamente. (Por cierto, el Espanyol lleva la marcha allá donde va: juega en Londres y se monta la opereta de Gibraltar. Algunas casualidades, en la historia de este club, parecen la repera).
La reaparición de Aguirre en sala de prensa también implica repercusión y ayer El Vasco estuvo claro: si es por él, Moreno y Wakaso no están en venta. Casi se mostró tan inflexible como el Tottenham ante el alocado acoso por Bale, se podría decir. Pero veremos que acaba pasando, no sea que el Everton de Bob Martínez le saque el visado al ghanés. Hoy, a tal espuela caliente, se le echará en falta.
Y a quien se añora de verdad siempre es a Dani Jarque, personificación ya de la utopía de este club. La memoria del 21 acompañará este club como el horizonte ansiado al que hace una travesía. Recordar a Dani, una vez conseguido el esperado homenaje, no es ya una cuestión de nostalgia ni de melodrama, sino un canto esperanzado al futuro. L’etern capità debe impulsar el club con su ejemplo de exigencia, liderazgo y sacrificio. Hasta en este Matchday en pleno mes de agosto. Ilusión made in London, please.
