Es cierto que quizás el encuentro contra el Leganés no es el momento más propicio para dar minutos a los más jóvenes, pero si forman parte de la plantilla es porque tienen nivel para hacerlo y pueden jugar cualquier encuentro contra el rival que sea. Con todo el respeto del mundo hacia él, pero evidentemente no es lo mismo jugar con Campuzano en punta que con RDT. Pero, ¿y con Pol Lozano en el doble pivote junto a David López? Tenemos la manía de pensar que la función del primero es la de suplir al de Sant Cugat y que son jugadores de un corte muy parecido, pero Pol es un futbolista con más llegada. Es cierto que no demasiada y no destaca por ello, pero puede ser una buena opción para según qué duelos en los que se tenga que realizar un juego, por llamarlo de algún modo, no tan alegre.
Con Melendo renqueante del último duelo y Keidi Bare de regreso aunque sin estar al cien por cien, todo hace indicar que Fran Mérida entrará en la medular y Darder pasará a la mediapunta. Es lo más lógico, siempre y cuando Vicente Moreno siga confiando en el 4-2-3-1 que utiliza desde comienzos de curso. Pero el ex de Osasuna no es el mismo desde que perdió la titularidad, y su ingreso al terreno de juego desde el banquillo no ha aportado demasiado en los últimos partidos.
Tampoco es que hasta el momento Pol Lozano, uno de los mejores jugadores jóvenes españoles según Fútbol Draft, haya demostrado nada en el primer equipo, y en los minutos que ha tenido este curso apenas se ha podido mostrar. Han sido solo 86 en ocho jornadas, tiempo insuficiente para ver su talento, ese del que sí que pudimos disfrutar en el Espanyol B. Insisto en lo que comenté esta misma semana en La Grada Ràdio, Pol Lozano necesita cuatro o cinco partidos seguidos para poder demostrar de qué pasta esta hecha y darme o quitarme la razón. Porque en dos campañas solo ha sido titular en siete encuentros, y así pocas conclusiones se pueden sacar. De todos modos, en los duelos que ha estado en el once inicial, todos ellos la pasada campaña, el equipo solo perdió en dos.
Y si no va a tener oportunidades, cédanlo. Un futbolista de 21 años no puede estar parado, y mientras la pasada temporada alternó primer equipo con el Espanyol B para no perder ritmo competitivo -pasaba en cuestión de días de jugar en Europa a hacerlo en Segunda división B-, este curso ya no lo hará por contrato. Y porque tenía que ganar un peso en el equipo que de momento no tiene. Si se ha hecho con Víctor Gómez a un equipo que te garantizaba que tendría minutos, ¿por qué no con Pol Lozano o incluso con un Álex López del que parece que ya no nos acordemos y que es otra muy buena opción, si no van a tener protagonismo en el Espanyol? El lateral diestro se está saliendo en el Mirandés y es la prueba fehaciente de que a la juventud no se la puede tener parada. Porque si solo confiamos en ellos para los últimos 20 minutos, apaga y vámonos. Pese a ello, la competición es muy larga, con lo que espero y deseo que a Pol Lozano le llegue su momento.