El pasado diciembre los futbolistas del primer equipo del RCD Espanyol dejaron caer a Sergio González y miraron al otro lado, porque llegó un momento en el que la rotura era tan evidente que hubiésemos precisado del divorcio express. Sencillamente, se cansaron de Sergio, tras el partido de la primera vuelta contra el Celta, que hoy nos visita. Para que luego digan que un colectivo de futbolistas no puede hacer la cama al entrenador. Bien, pues ahora resulta que tampoco les gusta Galca… Bueno, pues ni Sergio, ni Galca… ¿Se puede saber qué cojones queréis, qué narices os gusta, qué diantre os pasa por esa cabeza? ¿Queréis una autogestión con un títere en el banquillo que os haga entrenar una horita cada día, a las 12, masaje, y acabar hablando por twitter a la prensa, o sea, a los socios que os pagan?
Futbolistas: en el fondo pensáis que nos salvaremos porque habrá tres equipos peores y, hombre, algún partido ganaremos porque Felipao tendrá el día y la bola acabará entrando. Y venga, a por la siguiente temporada, que iremos todos al despacho del señor Chen para que nos suba el contrato. Esta semana, al Village del Godó, cuatro fotitos y a ver si cae algo. Sabéis que en Barcelona se vive de puta madre y que con el vecino tenéis una presión relativa. A las malas, si el equipo desciende (todo es posible todavía) os iréis a un Granada, a un Eibar, a un equipo extranjero, ganaréis 400.000 euricos y otro añico a trincar. El Espanyol es vuestro trampolín, vuestro pequeño corralito, pero jamás una casa en propiedad. Además tenéis el descaro de pedir ayuda hoy a la afición. ¡Si en realidad os la suda! Ha habido un montón de partidos en los que no habéis competido. A este comportamiento yo le llamo caradura, desfachatez, inmoralidad e indolencia.
En el fondo me encantaría que este artículo, sincero y provocador a la vez, os encabronara y le metierais cuatro al Celta. Para eso lo hago, y para que después en sala de prensa dijerais que (generalizáis siempre) la prensa ha estado muy dura, algunos medios bla, bla, bla… Y como tengo una edad, no me gusta esconderme y jamás he sido de los que tiran la piedra y generalizan, de todo esto que digo salvo a Víctor Sánchez. Es EL ÚNICO que pienso que siente los colores.
En cuanto al actual entrenador… Un momento que voy a contar: Uno, dos, tres, cuatro y cinco. Mejor otro día. ¡¡Tienes trabajo, Señor Chen!! ¡Salud y optimismo!
¡cuánta razón!
Cuánta razón Sergi, cuánta razón!!! Nos toman el pelo partido a partido!