El Espanyol presentó el pasado jueves las equipaciones oficiales que lucirán todos los jugadores del club la próxima temporada. Una 2021-2022 que, especialmente, será de vital importancia para el primer equipo. Un año más, y ya van unos cuantos, el cuadro perico deberá demostrar su mejor nivel para alcanzar los objetivos marcados. Es difícil encontrar un curso en las últimas 4 décadas que haya sido tranquilo en el seno blanquiazul. En esta ocasión, los jugadores de Vicente Moreno tendrán el examen de la Primera división. La última temporada en Segunda se saldó con un sobresaliente. Ascenso y título de Liga, por este orden. El conjunto blanquiazul remató el objetivo ante el Zaragoza el pasado 8 de mayo tras empatar a cero. Lo hizo con la elástica amarilla, que era la segunda camiseta de esta temporada en Segunda. Seguro que no será de las más recordadas de los últimos tiempos, aunque la imagen sobre el césped de La Romareda siempre quedará para la historia. Una historia que nos transporta a la temporada 1987-88 donde el Espanyol llegó a la final de la Copa de la UEFA. En la vuelta de los cuartos de final, la segunda camiseta fue la roja con franjas horizontales blanquiazules estrenada ese año. Precisamente, dos temporadas más tarde, el equipo logró el ascenso a Primera división con ese mismo diseño tras superar al Málaga en una histórica tanda de penaltis. El añorado Juanjo Díaz dirigiendo desde el banquillo y con un Albert Albesa vistiéndose (con dicha camiseta) de héroe y marcando el penalti decisivo ante el guardameta Jaro. Eran otras épocas y los diseños permanecían durante varias temporadas.
En este retorno a la máxima categoría, el club ha querido recuperar el rojo y hacer un homenaje a esa histórica elástica por varios motivos. Por un lado, se trata de una equipación de las más recordadas de la marca Massana. Por otro, permitirá a todos los aficionados transportarnos a esos años históricos en los que el equipo disputó una final de la UEFA y a la siguiente temporada descendió. Una estadística que se ha repetido recientemente y que el equipo debe superar de una vez por todas. El club no debe acostumbrarse a que a una buena temporada le siga una desastrosa como ya sucediera el año de la final de Leverkusen y como acabó sucediendo tras la milagrosa clasificación europea con Rubi en 2019. De momento, la elección del diseño del curso que está a punto de empezar ha sido muy acertado. Y la segunda equipación seguro que será de las más vendidas en un año que vuelve a ser de los más importantes de la historia.