Los mentideros pericos aseguran que Sergio Oliveró podría ser la alternativa, en un futuro más o menos lejano, a la actual presidencia del club. Está claro que para ocupar el sillón basta con tener el número necesario de acciones, pero para tener paz social hay que patearse la calle. Y ayer no estuvo en la ‘cigronada’, que aunque es territorio Sánchez Llibre puro y duro, era una gran oportunidad para, de manera elegante, transmitir el mensaje de “quiero conocer a todo el mundo”. Por supuesto, ni Oliveró se ha postulado públicamente como candidato, ni su presencia era obligatoria en la sede los Pericos de Vilassar de Mar. Igual cuando quiera baños de masas ya es tarde.
Quienes si estuvieron fueron Ramon Condal, Daniel Sánchez Llibre y Josep Sánchez Llibre, que jugaban en ‘casa’ y recibieron constantes muestras de cariño. El presidente de la peña anfitriona, Lluís Font, les colmó de atenciones, y no se privó de reconocer en público y privado “que no solo son socios de la entidad, son amigos”. Aunque la estrella no fueron ellos, sino los magníficos garbanzos de Jordi Asín, que al frente de su comando de “Reservoir Pinotxos”, demostró el porqué de la buena fama de su restaurante, situado en La Boquería. Demostró una vez más porque la ‘cigronada’ es una de las citas más importantes de la vida social y gastronómica blanquiazul.
Por supuesto, la situación del primer equipo era lo más comentado en todos los corrillos. Unos, vendiendo optimismo, y otros rememorando negras temporadas del pasado. Alberto Ariza, el presidente de la FCPE, siempre positivo, aunque asegurando que estaban dispuestos a arrimar el hombro lo que hiciera falta para levanta la situación. El presidente de la APMAE, Ferran Marín, inquirió al personal del club sobre la fecha de la próxima junta general de accionistas. La respuesta está en el viento, porque a él no se la dieron. Si es que la saben.
La incansable Anna Maria Fusté no paró de recibir besos de centenares de personas. Como ni se postula, ni se postulará, para ningún cargo, es libre para decir lo que quiera. Y eso lo agradece la parroquia blanquiazul. El director de comunicación, Xavi Salvatella, y el responsable de peñas, Jaume Martínez, velaron para que el protocolo se cumpliera en todo momento. Como siempre, todo salió perfecto, y la única novedad fue la actuación del monologuista y cantante de la localidad Félix Moyano, que cerró la fiesta arrancandose con todo un hinmo: el “My way” de Frank Sinatra, pero en la lengua de Cervantes, muy apropiado, ya que se trataba de una reunión de pericos que vivimos el fútbol a nuestra manera.