El delantero del Espanyol Pere Milla es uno de esos ejemplos de futbolista cuestionado por buena parte de los aficionados blanquiazules por su momento personal, y que en cambio cuenta con la absoluta confianza de su técnico, en este caso Luis Miguel Ramis. La grada virtual blanquiazul pone hincapié en redes al hecho de que no logre congraciarse con el gol; el ilerdense lleva 4 dianas desde su llegada este pasado verano, la primera en la 2ª jornada ante el Racing, la segunda en la 8ª ante el Racing de Ferrol, la tercera en la siguiente, la 9ª, ante el FC Cartagena, y la última, la única que ha anotado desde la llegada de Luis Miguel Ramis, en la jornada 17ª ante el Alcorcón.

Es decir, lleva un gol en los últimos 13 encuentros.
Pere Milla, un fijo desde la llegada de Ramis al Espanyol
Pese a ello, Pere Milla ha sido titular en todos los partidos desde la llegada de Ramis, con la excepción del encuentro ante el Real Zaragoza, en el que ingresó en el campo tras el paso por vestuarios en lugar de Jofre Carreras. Jugó 86 minutos frente al Huesca, 84’ ante el Elche, 77’ el día del Alcorcón, 68’ contra el Real Oviedo, los segundos 45’ frente al Zaragoza, 65’ en el campo del Andorra, 76’ en casa ante el Burgos y el pasado sábado, 84’ ante el Racing de Ferrol.
Pere Milla, la gran apuesta del pasado mercado de verano del director deportivo del Espanyol Fran Garagarza
Muchos minutos pese a estos 5 partidos en blanco para la gran apuesta del pasado mercado de verano para Fran Garagarza -fue el fichaje más caro,de 2,5 millones de euros y un plus de 500.000 para el Elche CF si se logra el retorno a Primera-, y es que Ramis valora extraordinariamente su capacidad de sacrificio y el trabajo que hace el ilerdense sobre el campo, independientemente de su aportación goleadora.

Tal vez esos partidos que lleva Pere Milla sin anotar y la falta de confianza que ello implica explican que un hombre con su experiencia no supiera transformar la magnífica oportunidad de la que gozó en A Malata ante el Racing de Ferrol: en el minuto 35, se plantó ante el portero local, pero optó por tratar de regatearle y el toque se le fue algo largo, por lo que llegó forzado al remate y, con la portería vacía, terminó estrellando el balón al palo (aunque es cierto que Delmás llegó a tocar el esférico y desviarlo).
También hay que apuntar que podría haber sido decisivo en un desenlace desfavorable para el Espanyol, ya que Pere Milla protagonizó una discutida acción en que tras agarrar primero de la camiseta a Víctor Moya, termina derribando al centrocampista dentro del área, acción que afortunadamente el VAR no consideró punible.
“Los goles son como el kétchup: hay veces que pulsas y no sale nada y, de golpe, vuelves a pulsar y salen todos. No hay prisa”; la filosofía de Pere Milla
Pere Milla se convirtió en el pasado mercado de verano el primer refuerzo del RCD Espanyol. Curiosamente, Fran Garagarza, director deportivo blanquiazul, se encargó de reclutarlo para el Eibar en el 2016, aunque no logró explotar en el club vasco y fue en el Elche donde ofreció su mejor versión. Pese a ello, siempre ha conservado un buen recuerdo del de Mutriku; recientemente explicaba en ‘Relevo’ que “le tuve un cariño especial y eso que me echaron del Eibar… Me enseñaron lo que es el fútbol profesional, lo que cuesta. En las distancias cortas es una persona normal, y hoy en día es difícil encontrar gente así. Está atento a todo, es amable. Diría que lo dejen trabajar. Está conociendo esto. Poco a poco y buena letra”. Atacante versátil ya que puede actuar en todas las posiciones de la media punta y en la punta de ataque, siempre ha sido enemigo de marcarse metas por lo que respecta a número de goles, como explicaba con un ejemplo muy gráfico en una entrevista a ‘Tv3’ cuando aún solo llevaba uno en su cuenta particular como anotador con la blanquiazul: “Yo siempre he dicho que los goles son como el kétchup: hay veces que pulsas y no sale nada y, de golpe, vuelves a pulsar y salen todos. No hay prisa. Lo importante es ganar, esto es lo que cuenta. ¿Quieres que te diga la verdad? Me da igual el número de goles que haga. Mientras subamos, me dan exactamente igual los goles. Como delantero es feo decirlo, pero si solo me quedo con el que ya marqué contra el Racing sin público pero subimos a Primera ya me está bien… Es por eso que estoy aquí: para subir a Primera, porque yo quiero jugar con el Espanyol en Primera división y cuanto antes mejor”. De todos modos, todo el espanyolismo confía que pronto pueda reencontrarse con ese gol tan necesario para el equipo, y poder volver a verlo sonreír durante esas celebraciones tan características que protagoniza cuando ve puerta.

