El técnico del primer rival del Espanyol en LaLiga EA Sports, el Valladolid, sigue siendo para sorpresa de muchos Paulo Pezzolano. El técnico uruguayo, que pese a lograr el ascenso el pasado curso nunca convenció a una grada con la que ha tenido muchas tiranteces, incluidas declaraciones intempestivas en que acusaba a la ciudad de ser xenófoba, será el encargado de dirigir al Pucela en su retorno a la máxima categoría. Llegado tras la destitución de Pacheta hace ahora dos años con el aval de la directiva, procedente del Cruzeiro brasileño, club también propiedad de Ronaldo por aquel entonces, la manera en que desperdició una oportunidad de oro ante el Getafe para conservar la categoría y su decisión de acaparar sobre su persona todas las críticas alejando los focos de sus hombres le pasaron factura, llegándose a dar por segura su marcha pese a lograr volver a Primera división tras recibir además un tirón de orejas por sus polémicas palabras por parte de la directiva. Sin embargo, con la venta del club en stand by, parece que las aguas se han calmado y que afición y técnico, que de hecho tenía derecho a la renovación automática por el ascenso, están condenados a entenderse, por el bien de un equipo que habrá de centrarse en la tarea, harto complicada, de la permanencia.
Pezzolano, en la previa del Valladolid – Espanyol
En la previa de este Valladolid – Espanyol, Pezzolano ha reconocido que “el Espanyol y nosotros nos conocemos, ellos ahora ponen cinco atrás. Hay partidos que son puntos dobles, pero el campeonato es larguísimo. Es importante ganar o no perder puntos contra rivales directos, saber jugar tu campeonato. Hay que salir a por todas en casa”. “En el juego venimos mejorando mucho y queremos seguir, estamos en buen momento. Los primeros partidos son muy disputados. Hay que adaptarse a los jugadores que tenemos, lo más importante es la intensidad. Un avance es que el equipo ya tiene una cultura de trabajo”, indica el uruguayo, que pese a que la plantill aún no está configurada al 100% destaca que “estoy con mucha ilusión, muy contento con el vestuario y la plantilla. Vendrán más jugadores, no hablo en qué posiciones. Tenemos a Rosa, a Chasco, que viene creciendo, pero sin duda en el lateral izquierdo tiene que venir alguien más”. Finalmente, sobre su tensa relación en el pasado con la grada del Pucela, afirma que “estamos todos con mucha ilusión, hay mucho cariño mutuo, lo hemos visto durante toda la pretemporada. Espero estar todos juntos y luchar por un mismo objetivo. Queremos contagiar del campo hacia afuera y que todos vayamos de la mano”.