El Espanyol ha alcanzado este parón de noviembre con sensaciones encontradas: por un lado, sigue en la sexta plaza, metido en zona europea tras un arranque de curso que pocos esperaban; por otro, viene de perder dos partidos seguidos ante Alavés y Villarreal que han dejado deberes por hacer. En medio de este momento de pausa y reflexión, ha sido Pol Lozano quien ha tomado la palabra este miércoles en rueda de prensa. Y no es casualidad. El de Sant Quirze, uno de los jugadores más en forma del equipo, vive un momento especialmente dulce, asentado como pieza clave en el esquema de Manolo González.
Un canterano en su punto más alto
Después de años de idas y venidas, cesiones y lesiones, Pol Lozano ha encontrado por fin estabilidad en el primer equipo. Este curso, casi un tercio de Liga después, se ha ganado la titularidad con actuaciones sólidas, inteligentes y cargadas de sentido táctico. Su capacidad para dar equilibrio al centro del campo ha sido fundamental en muchos partidos, y su aportación ha ido mucho más allá de lo que marcan los números. En este contexto, su presencia hoy ante los medios tiene todo el sentido del mundo: es la imagen de un vestuario comprometido que no se descompone pese a los tropiezos.
Sextos en la tabla y con los pies en el suelo
Pese a las dos derrotas consecutivas, el Espanyol sigue sexto y con margen de mejora. Este parón llega en un momento clave para recuperar piernas y cabezas, afinar detalles y preparar un tramo de calendario que viene apretado. Entre semana de reflexión, análisis y entrenamientos en menor ritmo, la figura de Lozano representa bien el momento actual: calma, trabajo y ambición serena. Un tipo que ha sabido esperar su momento y lo está aprovechando como pocos.
El objetivo inmediato: cortar la mala racha
Preguntado por cómo encaran estos días sin competición, Pol lo tiene claro: “El objetivo principal es salir de estas derrotas consecutivas de la mejor forma posible. Sabemos que tenemos una oportunidad muy buena en casa para ganar al Sevilla y eso, seguir trabajando en lo nuestro, que creo que está saliendo bien, y que mentalmente nos despejemos y logremos los 3 puntos, que es lo que queremos”. Directo, sin rodeos.
El Atlético Baleares, un rival que le trae recuerdos
Sobre el sorteo copero que empareja al Espanyol con el Atlético Baleares en la segunda ronda de la Copa del Rey, el centrocampista lo celebró con una sonrisa nostálgica: “He jugado muchos años contra ellos estando en el Juvenil y el filial. Estoy muy contento de que nos haya tocado un rival de estas características, un buen campo, una buena ciudad… lo vamos a disfrutar seguro”.
Sextos… pero con la sensación de que falta algo
Pol Lozano no es de los que se escudan en los números si no cuadran con las sensaciones. “Si hubiésemos ganado estaríamos mucho mejor, seguramente. Pero también es verdad que al final te vas sexto… A principio de temporada no era el objetivo llegar así a noviembre, con todo el trabajo que hemos hecho es más que merecido. Llevamos menos puntos de los que hemos merecido, pero es fútbol. Por esa parte estamos bien, aunque con los tres puntos estaríamos mejor”, reflexionó con honestidad.
Resultados vs. sensaciones: cómo se gestiona esa tensión
En cuanto a jugar con la idea de que el equipo debería tener más puntos, pero sabiendo que el objetivo sigue siendo la salvación, Pol fue muy claro: “Al final el objetivo y lo que puedas creer es bastante diferente. El objetivo es el mismo de siempre, pero también es verdad que creo que deberíamos llevar más puntos. Son 18 y ha habido partidos en que hemos merecido más”.
Limpiar la cabeza tras dos derrotas
Una frase suya llamó la atención: “despejar la cabeza”. ¿A qué se refería? Él lo explicó con total claridad: “Cuando eres jugador de fútbol y llevas dos partidos perdiendo, sin haber marcado en el último, es como que no estamos trabajando bien… Pero son pensamientos que te has de quitar de la cabeza porque no es así. Se ha de ver todo globalmente, no ser resultadistas. Simplemente eso”.
Sobre el desencanto de parte de la afición: “Es normal”
Al ser cuestionado por la reacción de parte de la grada tras perder ante el Villarreal, Pol empatizó con los aficionados: “Es lógico, son personas. Cualquier persona ve al equipo en la posición que estamos en la Liga y quiere ganar en casa contra el Villarreal. Seguramente lo considerarían un rival directo por clasificación más que nada. Pero es normal, el fútbol es así. Las personas que siguen el fútbol son ambiciosas y nosotros también lo somos. Lo vemos desde otro punto de vista, pero es normal que la gente esté afectada. Si fuese aficionado también lo estaría”.
Luis de la Fuente lo sigue… y él sueña con la Roja
Desde AS se apunta que el seleccionador Luis de la Fuente está siguiendo muy de cerca su temporada. Preguntado por ello, Pol no ocultó la ilusión: “Evidentemente. Llevo muchos años con él, fue el que me dio la oportunidad en la Sub-19 y Sub-21. Me convocaba cuando jugaba con gente que no me tocaba por edad. Tengo muy buena relación con él y ojalá, sería un sueño”.
¿Líder? Sí, pero a su manera
Lozano es el único jugador de campo que ha sido titular en los 12 partidos de esta Liga, pero no presume ni un ápice. “¿Si me considero un líder de este Espanyol? En minutos seguramente. Llevo muchos años en este vestuario y te ganas una especie de respeto. Me gusta esa responsabilidad, que los compañeros te vean como una persona trabajadora, que está haciendo bien las cosas, un modelo a seguir… siempre me ha gustado eso. Estoy a disposición de cualquier compañero para lo que quiera”.
La exigencia de la grada, una señal de madurez
Sobre ese posible cambio de chip de la afición, Pol lo ve como algo positivo: “Sí, yo creo que el cambio de mentalidad está 100%. Ya no como afición, la afición nos ha transmitido esa mentalidad. Pero es verdad que cuando no ganas, da igual contra quién sea, genera una especie de decepción. Es la naturaleza del ser humano. Es normal que haya gente enfadada por perder ante el Villarreal. Pero yo creo que eso es muy positivo. El año pasado perdimos 1-2 contra ellos, pero la mentalidad no era esta. Lo que podía pensar la gente entonces no es lo que está pensando este año. Por tanto, creo que eso es positivo. Se ha dado un paso adelante y como plantilla también. Y nos afecta mucho más perder, positivamente, este año que el año pasado”.
¿Ha llegado su ‘prime’? Él cree que sí
Para cerrar, tocaba una más personal: si siente que ha llegado su mejor momento. Y la respuesta, sin dudarlo: “Probablemente, creo que sí, tanto a nivel personal como profesional”.