Después de lograr la permanencia en la categoría de manera holgada -a cinco jornadas del final-, el Espanyol B ya puede respirar tranquilo. Han sido muchas jornadas con el agua al cuello y sufriendo para no llegar a los últimos partidos con los deberes por hacer, pero lo cierto es que el filial ha logrado su objetivo con creces. Además, pese a la mala racha de 14 jornadas sin ganar y la cercanía del descenso en más de una ocasión, los blanquiazules no han ocupado dichos puestos ni el de promoción en ningún momento de la temporada, ni lo van a hacer pase lo que pase.
Por los malos tragos y las experiencias negativas que ha pasado el equipo, los jugadores del ‘B’ se han ganado a pulso el derecho de disfrutar en las últimas jornadas, empezando por el encuentro que juegan esta tarde ante el Olímpic. El conjunto valenciano se encuentra en tercera posición y se juega el disputar el play-off de ascenso, con lo que el match de hoy es muy importante para los visitantes.
No bajar los brazos
Pese a haber conseguido la salvación de manera definitiva, tanto Manolo Márquez como toda la plantilla del filial espanyolista quieren hacer un buen final liguero y acabar lo más arriba posible en la clasificación. El técnico del equipo no va a permitir que sus futbolistas se relajen y les va a exigir el máximo hasta que concluya la campaña. Así pues, se espera que el míster blanquiazul siga confiando en la base que ha logrado los últimos buenos resultados, con lo que el equipo titular de esta tarde podría asemejarse mucho al que puso en liza ante el Ontinyent. De esta manera, Paul Quaye podría seguir en el once, esta vez supliendo al sancionado Joan Jordà y formando pareja en el doble pivote con Fran Miranda, que vuelve al equipo tras perderse el último encuentro. También regresa Merchán, que tampoco estuvo disponible en la última jornada. Kilian, que no estuvo en Ontinyent por lesión, podría volver a la convocatoria y Duarte seguirá en el lateral zurdo una vez superadas unas molestias que le impidieron ejercitarse con normalidad a principios de semana.
Misma intensidad
El técnico del equipo confía en poder sumar por quinto partido consecutivo en Sadrià. Para ello, el equipo debe seguir dejándose la piel en el campo ante uno de los gallitos de la categoría. “Creo que el equipo, después de lo que ha vivido, se merece disfrutar y la mejor manera de disfrutar es ganar”, indicó Manolo Márquez, que está muy contento con el rendimiento de sus jugadores, y espera que no bajen el nivel mostrado en los últimos encuentros. “Cada uno debe intentar demostrar lo mejor, seguir la misma línea. Ha habido cambios en las últimas jornadas, sanciones, lesiones y los que han entrado, han respondido”. El míster no quiere que el equipo caiga en la relajación en los encuentros que le quedan hasta la conclusión del campeonato. “Aún quedan cinco partidos y debemos mantener la misma intensidad. Nos enfrentamos a equipos que se juegan mucho y, por respeto a los equipos implicados, tenemos que salir al máximo”, finalizó.