Visita el Espanyol al Atlético de Madrid en esta décimotercera jornada de LaLiga Santander 2022-23 en las horas más bajas de un cuadro local que ha sido eliminado de la Champions y de la Europa League y viene de caer ante el Cádiz CF. De un plantel en el que actualmente todo son dudas, incluso en lo que compete a su entrenador, Diego Pablo Simeone. Y como suele decirse, a perro flaco todo son pulgas. Efectivamente, porque además de contar con un ambiente enrarecido, los colchoneros también cuentan con bajas para este envite.
El Espanyol, ese ese equipo especialista en poder ser equipo aspirina y revivir a cualquier equipo en horas bajas y con dudas, y el mismo que es capaz de dar la campanada y hacer historia. Y en este sentido, el cuadro espanyolista, el 6 de mayo de 2018 escribió su nombre como el primer equipo capaz de ganar en Liga en el nuevo feudo del Atlético de Madrid, el por entonces nombrado Wanda Metropolitano (ahora Civitas Metropolitano tras el último acuerdo comercial alcanzado). Hace cinco temporadas, los pericos, a las órdenes de David Gallego tras la destitución de Quique Sánchez Flores, a tres jornadas para el final, alejó los fantasmas del descenso con un 2-0 con goles de Óscar Melendo -el primero que anotaba en Primera división-, y Leo Baptistao. Corría la jornada 36 y los de Simeone estaban invictos de locales, hasta que llegaron los pericos para aguar la fiesta. Pero desde entonces, en las tres visitas siguientes, nada de nada. Todo derrotas hasta la fecha. Bastos para un Espanyol que la pasada campaña vivió un infierno en el feudo rojiblanco, puesto que cuando el partido ya se daba por finalizado con 1-1 en el marcador, el VAR advirtió de unas manos de Raúl de Tomás dentro del área. La revisión de dichas imagenes no estuvieron exentas de polémica, con actuación estelar de Tomás Reñones y Mario Hermoso, y en la reanudación del juego, cuando corría ya el minuto 100, Yannick Carrasco transformó la pena máxima para establecer el 2-1 definitivo. por lo que el último recuerdo allí, no es especialmente agradable. Más bien todo lo contrario. Por lo que habrá ganas de revancha y de pescar en mar revuelto.
Y es en estos escenarios enrarecido, donde el Espanyol puede volver a hacer historia. De hecho, para empezar, necesita ganar como el comer para disipar dudas y alejarse del descenso. Atraviesan por horas bajas, como el Atlético de Madrid, aunque en el caso de los locales, la crispación es sustancial. Tanto que su principal grupo de animación, el Frente Atlético, ha convocado una sonada protesta. Tal y como anunciaron en un comunicado, han decidido no entrar al Metropolitano durante la priemra parte en señal de protesta, y una vez accedan al recinto al descanso, estarán sentados, sin animar y sin pancartas. Por lo que eso habrá que ver si juega a favor, o no, de los intereses de los de Diego Martínez.
— Frente Atlético (@FA82Oficial) November 1, 2022
El del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone, ya sabe que no podrá contar, ante el Espanyol, con varios de sus futbolistas. Saúl Ñíguez deberá cumplir ciclo de amonestaciones, y a esta ausencia hay que añadir a Thomas Lemar y Koke Resurrección, que tampoco estarán en este envite en el Metropolitano. Además, siguen muy pendientes de Marcos Llorente, al que ya esperaban el pasado martes en Champions League, pero alegaron que no tenía ‘buenas sensaciones’ y por ello causó baja. Por lo tanto, por ahora es duda. Veremos si finalmente puede estar en un envite con sabor a final para los colchoneros. Tregua si ganan, incendio importante si caen. Y es que esta es la peor situación del Atlético de Madrid en la era Simeone. Todo es un polvorín y el Espanyol es el que podría cabar haciéndolo saltar todo por los aires.