El Espanyol volvió a realizar una exhibición de lucha y calidad para lograr tres puntos que le aúpan a la zona noble de la tabla, acercándose a Europa. Sigue con su impresionante dinámica y rompió con la del Sporting en feudo perico. Un minuto histórico sirvió para que Caicedo adelantara a los blanquiazules y Diego López entrara en la historia del club. Los partidos se ganan en las áreas y el Espanyol, por suerte, tiene un portero de lo mejor de la liga y una delantera que ya quisieran muchos conjuntos. El equipo volvió a ofrecer una buena imagen. Todos tienen muy claro lo que tienen que hacer y los resultados están llegando. Los blanquiazules están en constante crecimiento y llegan lanzado al derbi del próximo domingo.
La mejor manera de ganar un partido es saliendo a por él. Y eso es lo que hizo Quique Sánchez Flores apostando por Caicedo en lugar del lesionado Pablo Piatti. El técnico ponía mucha pólvora en ataque con la intención de superar la defensa de cinco que había planteado Abelardo, pero se encontró con un conjunto asturiano que salió sin miedo y con el objetivo de llevar la iniciativa. Tras un aviso de Douglas, Gerard remataba alto desde la frontal. El inicio era muy abierto y con constantes imprecisiones por ambos lados. Había muchos espacios libres y el ritmo era bastante alto.
Con el paso de los minutos, el Espanyol empezó a tocar más el balón y hacerse con el control, aunque no era fácil encontrar espacios, ya que el Sporting incomodaba con su presión. Y cuando parecía que le empezaban a tomar el pulso al partido hubo que volver a empezar. Hernán no podía seguir, tras una caída de un rival encima, y Álvaro reaparecía tras más de dos meses. Los blanquiazules empezaban a creer en torno de un Jurado que se convirtió en el protagonista de la recta final del primer tiempo, para lo bueno, aunque también para lo malo. Gerard con un gran remate desde la frontal y Baptistao con un cabezazo avisaban de la insistencia del conjunto de Quique que empezaba a hacerse con el balón. Y precisamente en una pérdida de Jurado, el Sporting montó una contra que acabó en un disparo de Carmona fuera en la mejor ocasión visitante. El planteamiento asturiano les estaba creando problemas a los blanquiazules en un primer tiempo bastante desordenado.
Tras el descanso pareció repetirse la historia del día del Leganés. Los de Quique salieron a por el gol y en los primeros minutos Javi Fuego y David López obligaban a Cuéllar a emplearse a fondo. Las sensaciones eran positivas y pronto abrieron la lata. Una falta lateral lanzada por Víctor Sánchez era cabeceada al fondo de las mallas por un Felipe Caicedo, que recordó el jugador de sus mejores tiempos. El ecuatoriano le ganó la partida a Cuéllar, que falló en su salida, e hizo estallar la euforia en un momento que coincidió con que Diego López hizo historia en el club.
Con el marcador a favor, Quique apostó por reforzar el centro del campo con la entrada de Pape Diop. A partir de este momento cambió el decorado del partido. El Espanyol cedió la iniciativa a su rival y apostó por intentar sorprender a la contra. Y pronto Caicedo volvía a marcar, aunque el colegiado anulaba el gol por unas posibles manos. A medida que pasaban los minutos, los espanyolistas encontraban más espacios. Marc Roca y Baptistao buscaron el segundo. Se estaba perdonando y esto siempre es peligroso. No mataban el partido y esto se suele pagar. Y pudo suceder de no ser por San Diego López. En el minuto 90, el gallego sacó un cabezazo que todo el estadio vio dentro de la portería. Volvía a salvar a equipo y esa intervención propició un contragolpe que Baptistao se lo guisó todo para anotar el segundo. El triunfo estaba en el saco. Solo quedaba el descuento, pero ni así el espanyolismo pudo respirar tranquilo Un gol de Cop, tras un magistral lanzamiento de falta, acabó con la racha de imbatibilidad, aunque no impidió que este equipo siga creciendo y soñando. Soñar es gratis, pero este equipo da motivos para hacerlo. ¡Y el domingo toca derbi! Pues soñemos pericos.