Pese a que el 3-0 ante el Albacete en la primera jornada de Liga podía hacer presagiar que el paso del Espanyol sería un paseo militar, lo cierto es que aunque los resultados han acompañado ha quedado demostrado que como de hecho viene avisando Vicente Moreno desde el principio de curso el camino será largo y lleno de obstáculos. No ha habido un solo encuentro a excepción del jugado ante los manchegos empezando por el Mallorca, un conjunto potente que pese a un mal inicio ya demuestra que ha cogido la onda a la categoría, en que el equipo no haya tenido que luchar contra la oposición de unos rivales que pese a las palmarias diferencias de presupuesto y de calidad por lo que respecta a las respectivas plantillas han sido muy dignos oponentes que cuando el marcador aún no se había desequilibrado tuvieron sus opciones y ante los cuales ha sido necesario ir madurando los encuentros con paciencia. Como apuntaba certeramente el capitán David López el sábado si algo destaca de este inicio de curso ha sido ver como unos futbolistas a los que la pasada temporada se llegó a acusar de indolencia sobre el verde son capaces de ponerse el mono de trabajo asumiendo cuando es preciso tareas de contención sin que ello implique descuidar sus propias funciones. Un ejemplo palmario fue este encuentro ante el Alcorcón tras el cual reflexionaba Moreno, “eres consciente de la dificultad que tiene y lo estamos viendo en los partidos. Los rivales te lo ponen difícil, tienen buenos entrenadores, preparan un partido muy difícil… Me quedo con el resultado y con la forma, porque los chavales han insistido desde el inicio hasta el final. Los adversarios son muy buenos y pueden tener su opción. El equipo ha insistido y ha tenido tranquilidad para encontrar el premio”.
Mucho se ha insistido desde el vestuario estas semanas ante el hecho que tal vez el espectáculo visto no era del todo el esperado que este tipo de encuentros en que se ha de tener paciencia y picar piedra a la espera que los detalles y la calidad individual acaben decantando el marcador. De hecho el repaso de las jornadas que llevamos de campeonato avala la tesis del de Massanassa, un muy buen conocedor de la categoría y que conoce el tipo de planteamiento que abunda en la misma; sin ir más lejos y recurriendo los datos, hasta 9 de los once partidos de la última jornada acabaron con marcadores con solo ceros y unos, una tendencia que parece se acentúa cada vez más.
Así, aparte del 1-0 entre Espanyol y Alcorcón este marcador se repitió en el Logroñés-Almería, el Tenerife-Rayo, el Zaragoza-Albacete y el Oviedo-Sporting. Hubo 0-1 en el Lugo-Mallorca y el Leganés-Girona y empates 0-0 en el Málaga-Las Palmas y 1-1 en el caso del Fuenlabrada-Castellón. Es decir, cinco victorias locales por 1-0 y dos visitantes por 0-1, un empate a cero y otro a uno con solo nueve goles anotados entre 18 equipos. Esto no es algo excepcional sino que demuestra que es tendencia en la categoría: las anteriores cuatro jornadas se dieron ya 18 marcadores de este perfil con tanteos a base de cero y uno. Concretamente en la cuarta fueron seis de los once partidos (0-0 en el caso del Alcorcón-Zaragoza, 0-1 en el Mirandés-Ponferradina, Sabadell-Espanyol, Girona-Fuenlabrada y Almería-Sporting, además de un 1-1 entre Albacete y Oviedo. En la jornada 3, se dio en tres encuentros, Málaga-Alcorcón y Mallorca-Sabadell (1-0) y Logroñés-Castellón (1-1). En la segunda jornada hubo cuatro ejemplos (Castellón 0-1 Málaga, Cartagena 0-Sporting 1, Espanyol 0-Mallorca 0 y Mirandés 1-1 Oviedo), por 5 la primera (Sporting 1-0 Logroñés; Leganés 1-0 UDLP; Oviedo 0-0 Cartagena; Mirandés 0-0 Alcorcón y Mallorca 0-1 Rayo).
A la espera de si esta tendencia se asienta el debate está abierto a la hora de buscar explicaciones que expliquen este hecho: algunos apuntan a la excepcionalidad de las circunstancias que envuelven al fútbol por efecto de la pandemia, como que la falta de público supone un descenso en la presión que sienten los futbolistas al permanecer las gradas vacías lo que provoca que los futbolistas no teman posibles protestas en función del tipo de juego, más especulativo, o que desde el banquillo haya menos reticencias a plantear determinadas alineaciones o se apueste en un momento dado por un cambio de tipo defensivo. También hay quien apunta a que la igualdad entre los equipos provoca la adopción de tácticas más prudentes -los críticos las tildarían de más timoratas- para evitar imprevistos que obliguen a remontar marcadores; ciertamente, con estos partidos sin público se está viendo un fútbol en el que cambian los tiempos con un desarrollo más lento de lo habitual, con un respeto en ocasiones excesivo a los rivales y en los que se privilegia dejar la meta a cero antes de buscar sin ambages la meta rival. En el caso del Espanyol, hay que añadir que ante la etiqueta de gran favorito y el hecho que es con diferencia el conjunto más potente de la categoría los rivales hacen planteamientos de tipo defensivo y se cierran sin disimulo detrás.
Otro de los efectos de esta situación es que muchos de estos encuentros, se resuelven en las rectas finales -así fue ante Oviedo, y en especial ante Sabadell y Alcorcón en que nueve de los 13 puntos que le dan el liderato se ataron con goles en la última media hora- cuando los equipos intentan aprovechar los fallos de los rivales en especial si es como en el caso de los blanquiazules tienen un enorme talento tanto sobre la hierba como en el banquillo. Aparte del Espanyol que en la última jornada decidió el encuentro a falta de un cuarto de hora del final, pasó algo parecido con en Tenerife, que superó al rayo con una diana de Bermejo en el 80’; el Logroñés al Almería con otro de Andy en el 78’; el Mirandés, que doblegó al Sabadell con goles anotados en el 75’ y el 79’; o el Zaragoza, que batió al Albacete gracias al tanto de Narváez en los minutos finales.
Vamos a ver, si, la categoria es complicada, la motivacion por ganarnos grande…bla bla
Pero que no sirva de excusa, si le ponemos la intensidad y el trabajo del equipo rival, por calidad tenemos que llevarnos el 90% de los partidos. El presupuesto es un item bastante fiable para ver donde se situan los clubs (salvo excepciones claro esta).
A este equipo no podemos pedirle menos de que gane casi todos los partidos y que empate los pocos otros. Exigencia maxima.
Y si, vamos a vivir muchos cerrojazos en casa y fuera, pero tenemos jugadores para superar esas situaciones, Vicente Moreno ya sabe de la categoria.
Lo que esta pasando hasta ahora es lo normal, me atreveria a decir que aun podemos jugar mucho mejor y deberiamos ganar algunos partidos mas holgadamente.
Nada nuevo bajo el sol, la segunda división lleva años siendo competida e igualada; pierdes o ganas dos partidos y subes o bajas 4 puestos.
No es un tema de público o de presupuesto, segunda es dificil juegues en Son Moix o en el Ángel Carro y salvo contadas excepciones (como podría ser el Rayo que juega más alegre) los equipos tienden a anteponer el orden defensivo y el rigor táctico, prefieren el contraataque a la posesión y ahí es donde nosotros vamos a tener que ser pacientes, procurar dominar los partidos y minimizar errores porque por calidad individual en todas las líneas es evidente que somos superiores.