Pudo llevarse cualquiera el encuentro disputado en el Ciutat de València. Hubo oportunidades por ambos bandos y los dos equipos pusieron toda la carne en el asador para tratar de sumar los tres puntos. Pero finalmente el empate supone un nuevo encuentro en el que el Espanyol se adelanta en marcador y le acaban empatando. Nada nuevo bajo el sol y una de las mejoras que Rubi debe apuntarse en su libreta: cerrar los encuentros antes de que sea demasiado tarde.
La película contra los granotas ya la hemos visto en demasiadas ocasiones esta campaña, nada más y nada menos que en nueve partidos. Contra Celta, Valladolid, Huesca, Athletic, Getafe y Levante en el duelo de ayer el Espanyol se adelantó en el electrónico y acabó cediendo un empate, mientras que ante Alavés, Sevilla y Betis la historia fue peor, puesto que se acabó mordiendo el polvo. En total, 21 puntos desperdiciados por no saber cerrar los encuentros, con los cuales ahora el equipo estaría en una lucha por un objetivo más ambicioso. Pero no hace falta sumarlos todos; solo con los que el equipo acabó perdiendo tras festejar la primera diana, sumaría nueve unidades más, con las cuales estaría asentado en la séptima plaza de la tabla. Por contra, solo en tres ocasiones el equipo ha acabado ganando cuando le han igualado el tanto inicial: ante Villarreal y Valladolid por idéntico resultado (3-1) y contra el Girona en Montilivi (1-2).
Problemas a balón parado
Volvió el Espanyol a recibir dos goles, algo que, en las últimas once jornadas tan solo había ocurrido en una ocasión, en el derbi disputado en el Camp Nou. Los blanquiazules habían recuperado la solidez defensiva, pero la locura del Ciutat de València no permitió aguantarla.
Una de las dianas del Levante llegó a balón parado, uno de los males endémicos de este Espanyol y un problema subrayado en rojo por Rubi. Y es que con dicho tanto ya son 12 las dianas que ha encajado el cuadro perico en jugadas de estrategia en el actual torneo doméstico, el equipo que más lo hace. Siete han llegado procedente de una falta, como el gol del empate de Vezo tras centro de Campaña, y cinco más tras un saque de esquina.
A buen seguro que Rubi y su cuerpo técnico lo saben e inciden en mejorar dicha faceta. Tienen cinco jornadas para demostrar que la lección está aprendida.
