Nueva derrota para un Espanyol que tal y como aseguró su guardameta “cualquier cosa nos debilita”. Además admitió que de locales juegan “con una presión añadida”, y al final todo sale al revés. Pues a su entender “lo normal es que el mejor nivel del equipo y los puntos se logren en casa”.
Como no podía ser de otra forma, Diego lamentó que “este era un partido para ganar, pero se nos ha torcido con un penalti muy dudoso. A perro flaco todo son pulgas”. Pero pese a ello apeló al trabajo y a la paciencia: “Tenemos que sobreponernos a todo esto e ir hacia adelante. No estamos en una buena racha, pero hay que seguir intentándolo”.
El penalti en contra hizo daño, aunque el de Paradela no escondió que “antes del gol ya teníamos dudas. Los contrarios saben que estamos en un momento delicado, nos aprietan y no somos capaces de reaccionar atacando. No hay mucho más que decir. Simplemente que hay que mejorar y que tanto a nivel individual como grupal debemos exigirnos más, aunque hemos estado empujando hasta el final incluso estando con diez. Todavía queda mucho”.
Finalmente aseguró que “lo seguiremos dando todo independientemente de que las cosas salgan bien o no”.