Tras el partido ante el Rayo, en el que forzó tras salir visiblemente cojo después del encuentro anterior en el Villamarín, no se ha vuelto a ver a Anaitz Arbilla sobre los terrenos de juego. Desde ese mes de octubre el lateral perico está viviendo un calvario por culpa de una dolencia en el tendón de Aquiles.
La evolución es más lenta de lo esperado, pero no se contempla que pase por el quirófano, ya que los médicos no tienen la seguridad de que una operación solucione la tendinitis y por lo tanto seguirán con tratamiento conservador
