El verano no ha sido sencillo en el Espanyol y si no que se lo pregunten al director deportivo Domingo Catoira. La falta de recursos para reforzarse y la mala gestión realizada por todas las partes en el caso Raúl de Tomás han centrado algunas críticas en el máximo responsable deportivo. Hoy en La Grada hemos querido entrevistar a Catoira para intentar aclarar muchas de las dudas que tiene el espanyolismo. Como buen gallego no se ha mojado demasiado y, pese a las críticas que piden su dimisión, solo está centrado en seguir construyendo un proyecto que en enero tendrá los refuerzos que ahora no han llegado.
Domingo, Raúl de Tomás os menciona de una manera muy grave en el comunicado que emitió. ¿Qué piensas de eso?
No siento nada respecto al comunicado. Es la expresión de alguien que se va de esa manera. Cada uno tiene sus valores y yo sé la relación que he tenido con él. Ni me sorprende ni me siento decepcionado. No me siento ni aludido. No esperaba otra cosa.
Él os ningunea y menosprecia vuestro curriculum…
A cada persona la representan los hechos que va construyendo más allá de sus logros monetarios… Las declaraciones que hace del míster y sobre mí son mentira. En ningún momento se le ha arrinconado. Sería un error como máximo responsable de la plantilla, y más si es un activo a nivel deportivo y económico. Todo el mundo sabe que no es así.
¿Te sabe mal haberle encubierto, mintiendo con la lesión?
No me arrepiento. Lo que puedo entender que nuestra afición, que es el patrimonio más grande, pueda sentir cierta decepción con la imagen dada en las últimas horas y asumo la máxima responsabilidad. Se habrán podido hacer las cosas mejor, pero en ningún caso se ha ayudado a mantener una situación oculta. El club nunca le quiso vender. Su situación es recurrente desde que llega. En el primer año, tras bajar, ya quiere buscar una salida, el año anterior igual y este, el primer día que habla conmigo es para decirme que su ciclo en el club ha acabado. Yo le hago ver que hay jugadores que han hecho historia, como Tamudo, y él puede verse reflejado. Me dice que ya ha cumplido sus objetivos aquí y ha persistido en su intención de salir. Nosotros hemos buscado lo mejor para la entidad y, a partir del día 1, solucionar un problema a largo y corto plazo. Ningún jugador está por encima de la entidad.
Para hacer un proyecto solo se podía vender a De Tomás. ¿Por qué no todos fuisteis con la verdad por delante?
En cualquier planificación están todos los escenarios, y él y otros estaban en el mercado, es obvio. Pero no hemos salido a mercadear, el proyecto no estaba basado en su venta. Intentaremos completar el mercado con dos o tres incorporaciones en enero. Él nos dice que quiere ser vendido, pero no llegan ofertas hasta la del Rayo el último día. La imagen del cierre y la posterior es la que más nos duele. El club ha optado por solucionar un problema que podía lastrar no solo el presente sino también el futuro.
¿Cómo entendéis este precedente tan grave? ¿Qué os lleva a arrojar la toalla?
Hay dos partes. Claro que se ha intentado reconducir. Yo me he reunido en varias ocasiones y le he dicho que lo mejor era reincorporarse al grupo. Él dice que tiene molestias y, a partir de ahí, el tema del dolor es muy personal. Allí no hay nada que hacer. Era un activo muy importante del club y el mejor escaparate era que estuviera jugando o entrenando. Es mentira que ha estado arrinconado.
¿Qué pasa en la reunión con Diego Martínez del primer día?
Él no juega la última jornada por una sanción. Nos ponemos en contacto y nos comenta que al estar en selección desearía reintegrarse más tarde. El día 14 hace pruebas médicas y tiene la primera charla conmigo, en la que dice que ha acabado sus objetivos aquí, que está en el mismo momento que vivió en el Benfica y necesita salir. Dice que si no tiene los objetivos focalizados ha de salir.
¿Es allí cuando pide más dinero?
No, es posterior. Pero no nos lo planteamos. Entendimos que no era una situación de corto plazo. Que su salario era muy alto para estar aquí y que un aumento no era viable. Nos dice que no tiene ofertas, pero que las tendrá. No le decimos que ha de ser vendido, pero él insiste que quizás puede ayudar con una venta. Nosotros creemos que el crecimiento del club y los valores que defiende la afición pasan por ser un equipo. Y situaciones como esta se salen. No hay ningún jugador que pueda estar por encima de la entidad.
¿En qué momento decidís que hay que dejarlo salir?
El míster casi está al margen desde el primer día, donde le dice antes que lo que me comentó a mí. No creo que hayamos accedido a ningún chantaje. El último día de mercado me dice que no va a escuchar ofertas y que escuchemos al Rayo, y le digo que hay unas variables a cumplir.
Si, el día 31 os dice que quiere salir, con ese dinero podríamos haber fichado a alguien, ¿no?
Yo le transmito que si no hay ofertas en firme se ha de quedar y seguir trabajando. Tras el cierre del mercado se convirtió en un problema grave y lo hemos querido quitar. El día 1 no se llegó a ningún acuerdo. El día 2 vuelvo a tener una reunión con Raúl e insiste en que no puede jugar más aquí y si tiene que ir a un mercado alternativo está dispuesto. Era un problema que podía lastrar el proyecto futuro. Su actitud no iba a cambiar y así lo expresa.
Por todo lo que ha pasado hay mucha gente que está pidiendo tu dimisión. ¿Qué piensas?
No hago valoraciones. El trabajo lo hago pensando en el proyecto que acabamos de iniciar con uno de los mejores entrenadores de España. A la afición le pido que crea en el proyecto, aunque es obvio que no pudimos completar el mercado y lo haremos en enero. El equipo tiene alma y ha conectado con la afición. Se asemeja a lo que la afición busca. Mi trabajo está centrado en pensar en la entidad. Hemos de completar cosa.
¿Cuál es el objetivo de este equipo? ¿A qué puede aspirar?
Es obvio que es un equipo nuevo al que estamos forzando y llevando al límite. Hemos dado una imagen positiva, aunque llevamos un déficit de puntos. No queremos que este déficit haga perder confianza a un grupo limpio y muy unido. Es cierto que necesitamos dos jugadores más de jerarquía, que es lo que queríamos ahora, y esperamos completarlo en enero.
¿Iremos a por César Montes antes del Mundial?
Antes no es viable y el Mundial es una dificultad añadida.
¿Rioja?
Lo que necesitamos es un banda de jerarquía y no hemos escondido nada.
¿Denis Suárez?
Es muy complejo hablar del mercado de enero. No buscamos un media punta, pero sí un centrocampista.