En el Barça no pueden olvidarse del Espanyol. Por mucho que digan que los derbis no son tan importantes para ellos, la realidad es que parecen obsesionados con los perico. El derbi del día 31 de diciembre ya calienta motores. Y el Espanyol estará solo en el Camp Nou. En la línea de los últimos años, el conjunto azulgrana, al igual que está haciendo el Espanyol, no venderá entradas a los aficionados rivales, según anuncia en su página web. Nada extraño. Pero, en la misma página hay una información que llama la atención.
Tras anunciar que está prohibida la venta para aficionados del Espanyol, añade que “se denegará el acceso al estadio a aficionados con vestimenta o emblemas del Espanyol”. Así que si algún perico tenía la intención de ir al feudo azulgrana invitado por algún amigo culé, ya sabe que no podrá llevar nada blanquiazul.
Una normativa que el Barça suele utilizar en ocasiones, hace unas temporadas fue denunciada por aficionados del Sabadell, pero que fue incapaz de poder aplicar en un partido europeo contra el Eintrach de Franckfurt que tiñó el Camp Nou de blanco con unos 30.000 aficionados alemanes.